Rivalidad en ineficacia

Salamanca y Racing dejaron ayer patente su inoperancia de cara a la portería contraria. En un encuentro entre iguales, lo único que faltó fue un poco de eficiencia final. Regresaba el Salamanca ayer a su Liga con el animo crecido. Empezó el partido asentado, con el ego engordado tras su victoria frente al Barça, y con ganas de acabar ,por la vía rápida. Así, inició el encuentro con ímpetu y sin muchas dificultades para superar el andamiaje defensivo con el que viaja Marcos Alonso. Sólo Correa y Porfirio tuvieron libertad para correr hacia la portería rival.Pocos minutos duró la autoconfianza local, que dejó paso a lo acostumbrado: juego carente de verticalidad y clarividencia ante puerta. El dominio fue local, pero las dos ocasiones más claras del primer tiempo y la única que hubo en el segundo, las dispuso Correa, un lunar en un equipo pensado para buscar el empate.

Con mayor frescura empezó la segunda parte. Marcos liberó de sus ataduras defensivas a alguno de sus hombres, como Arpón, que entró por Ismael, y Guerrero, que hizo lo propio por Tais. El partido era propicio para librar una gran batalla. Pero no fue así.

Por otra parte, ayer se supo que el rumano Gabriel Popescu jugará por fin en el Salamanca. Dos años ha tardado el club salmantino en lograr la contratación de este centrocampista internacional rumano, que marcó el gol a España en el amistoso de Palma de Mallorca.