Cascos se lesiona esquiando, es escayolado y tendrá que ser operado

El vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Alvarez Cascos, se lesionó ayer esquiando en la. estación invernal de Formigal, en el Pirineo de Huesca, al resentirse de una vieja afección en una rodilla. Cascos fue trasladado al hospital San Jorge de la capital oscense, donde fue ingresado para, realizarle distintas radiografías. Fue escayolado y más tarde desplazado a Madrid, donde será intervenido, probablemente en el hospital Ramón y Cajal. Poco antes de media noche llegó a la clínica Mapfre, en la localidad madrileña de Majadahonda, para ser examinado por el doctor Pedro Guillén. En esa clínica le practicarán diversas pruebas para determinar el alcance de la lesión y analizar si procede una intervención quirúrgica.El vicepresidente disfrutaba estos días de vacaciones con su esposa, Gemma Ruiz, en Formigal. Ayer, sobre las 14.30 horas, abandonó las pistas al dolerse de una rodilla tras una caída. Ya en el hospital de Huesca, sobre las cinco de la tarde, los médicos optaron por inmovilizarle la pierna tras diagnosticarle un "hundimiento de la meseta tibial''. En ese centro hospitalario permaneció tres horas y fue visitado, entre otros dirigentes del PP, por el diputado nacional por Huesca César Villalón y por el presidente de la Diputación, el senador Rodolfo Aínsa. El vicepresidente aprendió a esquiar precisamente en esta estación pirenaica hace tres años.

Cascos reconoció que hace años que sufre molestias en la rodilla izquierda. En declaraciones a la Cope, relató que, tras la caída, "había el clásico hematoma del que han sacado bastante sangre. Lo que sí se veía en la radiografía era una contusión de huesos muy importante, y eso debe ser preludio de que en algún ligamento haya alguna pequeña avería". El vicepresidente añadió que probablemente tendrá que ,,arrastrar alguna escayola" aunque restó importancia a la intervención que probablemente le tendrá que ser practicada.

Entrevista en 'Abc'

En la misma jornada, Cascos detallaba en una extensa entrevista en Abc todos los logros del Ejecutivo durante 1997, que puntuaba como un "notable" en alza, y aventuraba una buena ristra de posibles éxitos en la gestión a realizar durante 1998. Cascos admite, en todo caso, un déficit: en política de comunicación, que depende directamente de él.Sobre los fallos en comunicación, reconoce: "También aquí hay que aplicar al máximo el espíritu de superación y el nivel de autoexigencia. En el terreno de la comunicación, más que en ningún otro, tenemos que intentar mejorar y superarnos. Si ya hemos demostrado que somos un Gobierno que sabe acertar en lo sustancial, ahora debemos exigirnos acertar en lo circunstancial, en la comunicación, que es lo que va a completar nuestra sintonía con la sociedad". Cascos también acepta cierto "desgaste" por la ley digital y tacha de ''equívoco" sus recientes manifestaciones sobre la polémica ley del catalán.