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Una niña arrojada desde un balcón se salva al caer sobre una furgoneta

Una niña de siete meses voló al vacío ayer, poco antes de las 13.45, desde el tercer piso del hostal Cantábrico, en la calle de la Cruz (Centro). Según la policía, dos inmigrantes alojados en el hostal se colaron en la habitación de la pequeña y la arrojaron desde el balcón. La niña salvó su vida al caer sobre el techo de una furgoneta en marcha, aunque anoche su estado era grave.Los supuestos autores del homicidio frustrado estaban ayer detenidos. Los padres de la niña, de la República Democrática del Congo (ex Zaire), quedaron en libertad tras declarar. Todos los inmigrantes son refugiados políticos y están tutelados por la Cruz Roja.

La pequeña Ángella, que nació en Madrid en mayo, se deslomó sobre el techo de una furgoneta que circulaba por la calle. El cuerpo cayó de costado. "Eso la ha salvado de una muerte segura, aunque su estado es deficado", explicaron los médicos del Samur que la trasladaron al hospital del Niño Jesús. La niña sufre un severo traumatismo abdominal y craneal. La herida que más preocupa a los médicos es un hematoma subdural en el cerebro. Según los facultativos, hay que esperar la evolución de la lesión craneal.

La policía cree que tiraron a la niña por el balcón por una venganza

Según la Jefatura Superior de Policía, los hombres pudieron entrar a la habitación de la niña porque su madre se había ausentado. La mujer bajó a la recepción del hostal a atender una llamada y dejó la puerta abierta por si la pequeña lloraba, según explicó a la policía. El padre estaba ausente. Los dos presuntos agresores son los vecinos de puerta de los padres de Angella.La caída de la niña fue presenciada por una patrulla de agentes motorizados del Cuerpo Nacional de Policía. Fue esta pareja la que subió a la habitación y se encontró a los dos presuntos homicidas a los que detuvo tras esposarlos.

Los dos detenidos y la familia del bebé son solicitantes de asilo y están tutelados por la Cruz Roja. La institución benéfica costea la habitación mientras se resuelve la petición de asilo de los inmigrantes.

La familia del bebé llevaba ocho meses en España residiendo en el hostal. Aterrizaron en Madrid en mayo, en un vuelo procedente de la República Democrática del Congo. Estaban recibiendo clases de castellano y el padre acudía a cursos de formación laboral, según la Cruz Roja. La niña nació el pasado mes de mayo en La Paz.

Hace sólo dos semanas que los dos detenidos -uno de ellos, camerunés, y el otro, también de la República Democrática del Congo- estaban alojados en el hostal Cantábrico. También eran refugiados pendientes de arreglar su situación.

Los responsables del hostal Cantábrico, muy abatidos, no querían hacer comentarios. "Estamos muy tristes por las familias, que hasta ahora no nos habían dado ningún tipo de problema", señaló uno de los responsables del hostal.

Los dos detenidos permanecían anoche en la Brigada de Policía Judicial de la calle de Pontejos en el distrito Centro. Según la primera hipótesis policial, los inculpados pudieron actuar así por una venganza personal contra el padre.

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