Un puñado de estadísticas rotas

Hacía más de diez años que el campeonato español no presentaba peores registros goleadores. En los diez partidos disputados el fin de semana se han marcado 12 tantos, una cifra que parecía olvidada. Hay que remontarse a la temporada 86-87 para encontrar algo similar. En la jornada 26 de aquella campaña también se consiguieron 12 goles. Pero entonces eran 18 los participantes. De no remediarlo hoy Espanyol y Sporting, la jornada podría batir mayores récords negativos.El buen tono goleador sufrió ayer un inesperado parón. El promedio hasta esta jornada era similar al de pasadas temporadas: en la 95-96 se hicieron 2,69 goles por partido; en la 96-97, 2,75. La media de la actual era de 2,64. Hasta el día de ayer.Pero hubo otras marcas que pasaron a mejor vida. La del Celta, por ejemplo, que se mantenía entero en Balaídos, donde no había dejado escapar un solo punto. El único club de Primera que podía presumir de una cosa así. Pero llegó el Racing y la racha tocó a su fin. Mejor suerte corrió el Zaragoza, que consiguió vencer en La Romareda, lo que no hacía desde el 25 de mayo. En los seis me ses transcurridos ha disputado ocho partidos de Liga, con cuatro empates y cuatro derrotas. Ayer logró ganar merced a un gol de Pier, a quien no le tembló el pulso para batir a su ex equipo.Alguna estadística ha quedado indemne. Por ejemplo, la que asegura que Amato es imrescindible para que el Mallorca logre el éxito. Cinco victorias han conseguido los de Cúper y en las cinco con siguió Amato marcar. Ayer no lo hizo. Ayer no ganó el Mayorca.