Los camioneros franceses amenazan con paralizar de nuevo el país
Los camioneros franceses han declarado que "sólo falta una chispa para que la situación prenda como a finales de l996". Entonces los transportistas paralizaron el país y parte de la actividad industrial en Europa bloqueando con sus camiones autopistas y carreteras para forzar así los reclamados aumentos salariales y la reducción de la jornada laboral. Todos los sindicatos están dispuestos a lanzar 11 una acción larga y dura" a partir de la noche del domingo, 2 de noviembre para "sacar la profesión del salario mínimo".
Las negociaciones con la patronal están en punto muerto. Ésta ofrece un aumento salarial del 1,5% y los sindicatos estiman que "solo una oferta del 6% o 7% podría desactivar el conflicto". La patronal afirma que "los propietarios han ido hasta el límite de sus posibilidades" y ofrecen como alternativa 120.000 francos anuales brutos (tres millones de pesetas) el año 2000. "El plazo para Regar a los 10.000 francos mensuales [250.000 pesetas] es demasiado largo", según los sindicatos.
Otro de los puntos de litigio es la prima de 3.000 francos acordada en 1996 para poner fin a la huelga. Sólo algunas de las grandes empresas la han hecho efectiva. El ministro de Transportes, el comunista Jean-Claude Gayssot, ha reclamado el "respeto de los compromisos".
