Campaña llena de inauguraciones
Las posibilidades propagandísticas que le ofrece el cargo de presidente de la Xunta van a constituir una de las grandes bazas electorales de Manuel Fraga. Pese a las protestas de la oposición, el presidente gallego no interrumpirá en los próximos días la frenética campaña de inauguraciones, con amplia cobertura informativa de los medios de comunicación públicos, que le mantiene ocupado desde hace más de un mes.Los actos, envueltos en el teórico manto institucional, sé ven reforzados por la presencia de algunos ministros. El pasado jueves, sólo unas horas antes del comienzo de la campaña, fue el titular de Fomento, Rafael Arias-Salgado, quien asistió junto a Fraga a la apertura de dos tramos de autovía en Lugo. Ayer le acompanó el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, en la inauguración de la Academia Gallega de Policía y de una nueva comisaría en Vigo. El líder del Partido Popular gallego también presidió en solitario la puesta en marcha de una autopista de la información.
El PSOE asegura que algunos de estos proyectos están aún sin terminar. "Todo es una burda manipulación propagandística", declaró el secretario general de los socialistas gallegos, Francisco Vázquez, quien agregó con ironía: "Va a ser una campaña simpática, con una escuela e policías sin tabiques, una Audiencia Judicial que no estará terminada hasta' el próximo año y un pabellón multiusos sin uso en Santiago".
Manuel Fraga replica que él inaugura obras "todo el año" y no tiene por qué interrumpir esa actividad durante las fechas previas a los comicios, al entender que la obras realizadas son la plasmación de antiguas promesas electorales.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.