El Barca exhibe su temible arsenal

Una colección de armas mortíferas. Eso es el Barcelona de balonmano, que afronta la nueva temporada con el objetivo de consolidarse como el mejor equipo del mundo. Aunque esas armas no están todavía a punto, y a pesar de la ausencia del último gran fichaje -el croata Cavar-, los azulgrana ganaron ayer la Supercopa en Moguer (Huelva) frente al Caja Cantabria, totalmente distinto sin Duishebáiev."Aún nos falta bastante para estar a tope", insistían Valero Ribera y Enric Masíp, el entrenador y el capitán del equipo azulgrana, respectivamente. Esas carencias -sobre todo, falta de fluidez y de contraataque- permitieron que hubiera emoción en los últimos minutos del choque (28-27 cuando quedaban 120 segundos) y dejaron una pregunta en el aire -para los próximos nueve meses: ¿qué equipo, español o extranjero, será capaz de frenar al Barça? Cavar podrá disputar partidos oficiales en cuanto termine el larguísimo proceso de nacionalización del. pivote Shepkin, a quien Juan de Dios Román anhela en la selección española.

Mientras las armas se van engrasando hay que echar mano de privilegiados recursos. Por ejemplo, ¿no circula bien el balón por el exterior? Pase a los gigantescos pivotes (Shepkin -2,10- y Dedu -2,02-) y gol.

Esa es la principal diferencia entre un equipo formidable y otro potente. El Caja Cantabria actúa ahora de forma mucho más colectiva que con Duishebáiev, pero las genialidades de éste son imposibles de sustituir. Sin embargo, el binomio de Yakimovich (tiros y pases) con el alemán Rastner (letal como pivote), así como la ambivalencia de Esquer en el centro y en los extremos, pueden dar muchos sustos.

El noveno título de la Supercopa que consigue el Barcelona en su historial -además recibió un lingote de un kilo de plata y sus jugadores un llavero de este metal por su triunfo- provocó la lógica satisfacción en Rivera. "Se ha conquistado un título más en un partido difícil y, aunque tenemos que mejorar, mis jugado res han puesto en el campo lo que siempre les exijo", afirmó el técnico barcelonista.

Valentín Pastor, entrenador del Caja Cantabria, reconoció la superioridad del Barcelona: "Es un equipo hecho y no hace falta decir que es el mejor del mundo. Tiene el trabajo táctico muy asimilado y prácticamente es capaz, con la calidad individual de sus hombres, de jugar con los ojos cerrados". El técnico cántabro explicó: "El partido se decidió al final, cuando hicimos dos acciones individuales buscando el empate y no pudimos lograrlo". El choque concluyó con un gol de Iñaki Urdangarín.