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Ana Duato se desvincula de 'Médico de familia'

Rocío García

Es una separación, pero no traumática. La actriz Ana Duato se desvincula la próxima temporada de Médico de familia. Ha sido una decisión mutua, tomada por ella -"el personaje de Irene se ha ido diluyendo y tengo otras aspiraciones artísticas"- y los responsables de la serie de más éxito de los últimos años en la televisión española. "Médico de familia solo me ha traído cosas buenas a mi vida" dice Duato, quien tiene muy claro que "hacer buena televisión es responsabilidad de todos, incluidos los actores". Duato estrenará en octubre, junto a Imanol Arias, la obra de teatro El malentendido, de Camus.

Su entusiasmo, envidiable, se le sale literalmente de los ojos. A sus 29 años, esta actriz valenciana tiene claro que ha llegado el momento de dar un giro a su carrera artística. En otoño, ya no aparecerá en la serie de Tele 5 Médico de familia. Deja a su personaje Irene, la pediatra que le ha acompañado en el último año. "Irene fue un personaje que creció inesperadamente, tanto para ellos [los responsables de la serie] como para el público y para mí. Ha sido una decisión mutua. El personaje se va diluyendo y tú vas teniendo otras aspiraciones artísticas. Ha sido un proceso muy natural. Empecé en Médico de familia sin muchas expectativas, pero la historia de Irene funcionó muy bien. No tengo la sensación de abandonar la serie, tengo la sensación de que he tenido una colaboración maravillosa con todo el equipo, tanto profesional como personalmente, y que ha llegado el momento de la separación, pero no traumática. Ni abandono Médico de familia, ni me retiran de la serie. Sólo que nuestros caminos, de momento, se separan. Probablemente en el futuro se vuelvan a juntar".

Ni un defecto

Se niega en rotundo a sacar ni un defecto a Médico de familia -"que los tiene, como todas las series"- "Tenemos la enorme manía de sacar defectos a las cosas que funcionan. La gente ha disfrutado y disfruta mucho viendo esta serie, que ha marcado un hito en la televisión española", defiende Ana Duato, para quien en Médico de familia todos son prescindibles, excepto él: Emilio Aragón. "Él es la estrella".Tiene claro que su reciente experiencia televisiva -trabajó en Brigada central, Celia y Villarriba y Villabajo- le ha aportado sólo cosas buenas como actriz y como persona. "Cuando me lo ofrecieron, como profesional, tuve mis dudas. Pero ahora puedo decir que me ha aportado todo lo que desea un actor. No sólo la satisfacción de hacer un personaje que funciona y en una serie de máxima audiencia, sino el reconocimiento profesional de mis compañeros y de la gente en general. Y por encima de todo, una gran seguridad profesional".

Ha sido un año esplendoroso, al que ha contribuido el nacimiento de su primer hijo, que tiene ahora siete meses. "Sé que la vida está llena de sinsabores, pero quizás este año ha sido uno de los que más he disfrutado. No lo olvidaré nunca. Ha llegado todo como tenía que llegar, a su debido tiempo, para poder asimilarlo y disfrutarlo. Médico de familia me ha llegado en el momento adecuado, lo he utilizado, lo he disfrutado y ahora estoy recogiendo el fruto", confiesa.

A falta del estreno de su última película, El color de las nubes, que ha dirigido Mario Camus, su proyecto más inmediato está en el teatro. Junto a Imanol Arias, Adriana Ozores y Encarna Paso, Ana Duato intervendrá en la obra de teatro El malentendido, de Albert Camus, que supondrá el debú como director del actor Juan Calot. La obra se estrenará en octubre en Bilbao, para luego realizar una gira por todo el país. "El teatro y, sobre todo, el buen teatro, es un lujo", afirma la actriz, que no oculta las ganas de dar un giro a su vida artística. "En esta profesión uno no se puede acomodar y la televisión es el sitio ideal para poder hacerlo, porque la comodidad no es compatible con el arte, con realizar cosas creativas".

No tiene propuestas de cine, pero se imagina que su baja en televisión anime a los productores a contar con ella. De momento, espera el estreno de El color de las nubes, de Mario Camus, con el que ya trabajó en Adosados. "Mario Camus supone para mi carrera cinematográfica un antes y un después. Voy ciega. Con él sabes cómo se deben hacer las cosas y cómo no se deben hacer, y te marca. Mario es una persona que no pasa por tu carrera sin dejar huella", dice Duato.

Un medio digno

Es de la opinión de que la televisión se ha convertido en un medio tan digno de trabajo como el cine o el teatro. A la mala fama que arrastra han contribuido, en ,parte, según ella, los propios actores. "Hay que hacer buena televisión y eso es responsabilidad de todos, incluidos los actores, que debemos favorecer esta industria, porque el cine y el teatro se hace con cuentagotas. Es un medio de vida para mucha gente y lo que tenemos que hacer es hacer bien las cosas en las que creemos. Ya no hay ningún actor que se niegue a hacer televisión, porque se puede hacer buena televisión. Claro que hay televisión basura, pero para eso están también los actores, que están más arriba en marcar las pautas. Ahora mismo hay grandes actores trabajando en televisión, porque el que mueve un proyecto es el actor, es el que llama al público. Creo que se puede hacer muy buena televisión, lo contrario sería tirarnos piedras contra nuestro propio tejado".No hace falta que diga que una de sus máximas a la hora de trabajar es poner toda la energía e ilusión necesarias. Hablando con ella, es algo que se siente de veras.

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