San Sebastián y Alcobendas quieren suprimir un tramo de la futura M-50

Los ayuntamientos de San Sebastián de los Reyes (58.000 habitantes) y Alcobendas (83.000 habitantes) proponen como alternativa al trazado de la carretera M-50 aprobado por el Ministerio de Fomento la supresión del último tramo del mismo, que unirá la N-I con la M-607, por considerar que "los perjuicios para la población y para el medio ambiente no están justificados con el escaso beneficio que este tramo reportaría al tráfico en los municipios afectados".

Los responsables de ambos consistorios mantienen que los 15.414 millones que costarán los 14,6 kilómetros del último tramo de la M-50 son dinero perdido: "Los informes de los técnicos que han realizado el proyecto consideran que será un tramo, muy difícil de rentabilizar, ya que discurre paralelo a otras dos grandes vías [la M-30 y la M-401], separadas por poco más de un kilómetro", aseguró ayer el alcalde de San Sebastián, Ángel Requena (IU). El primer edil habló durante la presentación de las acciones de protesta que emprenderán ambos municipios y la plataforma M-50 No, formada por asociaciones vecinales grupos ecologistas y partidos. El primero de estos actos será una manifestación que recorrerá hoy las calles de ambas poblaciones.