Gil: "Es fácil 'largar' cuando uno se va"

El apoyo del Atlético a Antic es total. Por eso, Jesús Gil cargó ayer duramente contra aquellos futbolistas que han atacado últimamente al técnico. Es decir, Contra Simeone, contra Esnáider y contra Biagini, los tres ya fuera del Atlético. "Ninguno se ha manifestado mientras no sabían que se iban a ir", afirmó el presidente. "Pero ahora, cuando ya están fuera, sí. Cuando te vas es muy fácil largar"."Es lógico que el que sale del Atlético intente descargar contra alguien", afirmó. "¿Contra quién lo va a hacer? Pues contra un técnico que ha demostrado personalidad suficiente. Si respetamos los cargos, dentro de las competencias de un entrenador está saber elegir lo que quiere".

En su defensa, Gil se preguntó si todos los que critican al entrenador, en público o en privado, "han cumplido con su profesión". "Algunos", añadió, "deberían admitir que su ciclo se ha acabado". Cuando se le preguntó que también sería fácil atacar a los dirigentes y, sin embargo, no se hace, Gil culpó de ello a su hijo Miguel Angel: "Es que nadie se quiere ir de aquí. Todo por una labor de mi hijo, al que le ha dado por pagar puntualmente a todo el mundo, cosa que yo nunca he hecho. Está atontado".

Las quejas que han salido del vestuario coinciden en un punto: Antic no ha ido de frente en sus relaciones con los jugadores. Gil justificó a su entrenador: "Yo conozco muy bien todo lo que ha pasado ahí dentro. Antic está muy bien con el jugador cuando rinde. Y si no rinde, por encima de todo, para él, está el club". El dueño del Atlético calificó de "cosas de niños" las que han alterado las relaciones jugadores-técnico y negó que la lista de bajas elaborada por el entrenador obedeciera a vendettas personales, aunque reconoció: "Aquí, al que se le pone una cruz se va".

Solozábal, baja

Gil, por lo demás, no quiso avanzar demasiado los planes del equipo. Sólo admitió que habrá una revolución total en el equipo, "una transformación total en todos los órdenes". El curso que viene quedó estrenado ayer con la presentación de José Mari, a la que se unirán en los próximos días Lardín y Juninho (Gil insistió, pese a lo que dice el Tottenham, en que el brasileño, ya es del Atlético). Informó de que se ficharán aún otros siete jugadores (dos delanteros, dos centrocampistas, dos defensas y un portero) u ocho, si Futre consigue ponerse a tono físicamente y vuelve al fútbol activo ("vamos a ver si deja de fumar").Gil también aseguró que la lista de bajas engordará. Aunque no quiso confirmarlo por "el interés del club", insinuó que Solozábal será uno de los próximos en caer: "Yo viví el año del bicampeonato cómo era el diálogo de Roberto con el técnico, y el trato que tenía Solozábal con el técnico. Si se ha roto ese diálogo...".

Al ser preguntado por la opinión del aficionado rojiblanco, que no ha sido atendida por ejemplo en su insistente reivindicación de que continuara Simeone, Gil fue tajante: "Los cánticos están bien para las iglesias. El que quiera poner dinero para hacer los fichajes que venga".

La única preocupación mostrada por Gil procede de la guerra que sostiene con la Federación y los arbitrajes que él entiende premeditados en contra de su equipo: "No es fácil in vertir 10.200 millones de pesetas. Y menos, cuando tengo serias dudas de que en este casino la bola está trucada".