Simeone ficha por el Inter

Diego Pablo Simeone, de 27 años, deja el Atlético. Ya no hay solución. El futbolista hispanoargentino llegó ayer a un acuerdo por cuatro temporadas con el Inter de Milán. Por cada una de ellas cobrará 160 millones de pesetas. El Atlético, por el traspaso, recibirá 1.200 millones de pesetas. El esfuerzo de la afición por conseguir la continuidad de Sirneone no ha servido de nada.

Con la marcha de Simeone, el Atlético pierde mucha parte del carácter de su equipo. Sus contagiosos rasgos ganadores viajan para Italia. Un adiós que tardará en digerir la afición, que había mostrado con insistencia, tanto por oral como por escrito, su voluntad de que continuase el hispano argentino. Y el vestuario, en donde, Simeone se había convertido en un pilar fundamental, también se resentirá.Pero Radomir Antic había decidido hace tiempo que Simeone ya no le valía. Le considera un jugador cansado -lleva cuatro temporadas sin vacaciones-, marcado por la mala fama y poco aprovechable -sus obligaciones con la selección argentina y la frecuencia de sus sanciones le hacen perderse demasiados partidos-. Pero, sobre todo, Simeone paga su peso en el vestuario, un grupo que en la temporada que ahora concluye ha tenido numerosos roces con el entrenador. De hecho, en la decisión del argentino de renunciara su contrato en vigor y fichar por el Inter, han pesado mucho más sus diferencias con Antic que su comentada "deuda pendiente" con el fútbol italiano. Simeone deja España después de cinco campañas. Las dos primeras las pasó en el Sevilla (64 partidos de Liga y 12 goles). Los tres últimos, en los que alcanzó la gloria, los vivió en el Atlético. Actuó en 97 encuentros ligueros (8.171 minutos), en los que anotó 21 goles y de los que ganó 49, empató 22 y perdió 26. Conquistó una Liga y una Copa del Rey.

El Atlético puede considerar que el traspaso de Simeone es una operación rentable. Vende sus derechos, al margen de por un encuentro amistoso contra el Inter, por 1.200 millones de pesetas, prácticamente el doble de lo que le costó su fichaje del Sevilla. Sin embargo, pierde a un jugador que ha resultado fundamental en los últimos tiempos. Se ha debilitado. Y todavía, aunque sus planes prometen, no se ha reforzado lo suficiente. Tiene atados a José Mari y a Lardín (destinado a coger la plaza de Simeone, lo que supone, por las cualidades de cada uno, un cambio drástico). Pero nada más.

El fichaje de Juninho, un excelente media punta, sigue sin cerrarse. Aunque el acuerdo con el Middlesbrough parece cada vez más cercano. Y el de Vieri, el delantero centro en el que Antic piensa para corregir la marcha de Esnáider (con un pie en el Espanyol), es prácticamente imposible. Aunque el jugador italiano rogó ayer en público al Juventus que le facilitase su salida, el club volvió a calificar ayer a su delantero como intransferible.