Bonino pidió al líder socialista que acepte la presidencia de la Comisión Europea

Apenas hace 15 días, la comisaria europea de Pesca, Consumo y Ayuda Humanitaria, Emma Bonino, se entrevistó con Felipe González en Madrid y le insistió en que debía plantearse ser candidato a la presidencia de la Comisión Europea cuando culmine el mandato de Jacques Santer, en enero del año 2000.Las sugerencias para que ocupe un puesto en el ámbito internacional arreciarán ahora que ya no tiene responsabilidades en su partido. El objetivo de algunos mandatarios europeos continúa siendo el mismo que en junio de 1994, cuando hubo una fuerte presión para que sustituyera a Jacques Delors al frente de la Comisión.

El canciller alemán, Helmut Kohl, fue el impulsor, ya que siempre acarició la idea de que González accediera a la presidencia de la Comisión. El pasado otoño, Kohl volvió a la carga.

En principio, González no quiere dar muchas pistas sobre su futuro y tan sólo habla del trabajo pendiente que tiene para la reforma de la Internacional Socialista (IS). Ayer mismo, su actual presidente, Pierre Mauroy, que asistió "con emoción, sorpresa y estupor" al congreso del PSOE, consideró posible, si él quisiera, que González le suceda al frente de la IS. "Podría perfectamente ser mi propio sucesor", dijo. Aun así, Mauroy opina que González conserva "lo esencial: la gran responsabilidad política y estratégica, porque en el fondo", dice, "es el líder de los socialistas españoles", y no le extrañaría que volviera a ser el líder "mañana, cuando haya una campaña electoral". "Intentará retomar el poder", añadió.

Lo cierto es que González ya rechazó el puesto de Mauroy en septiembre, cuando la IS celebró su congreso en Nueva York.