La voz de la afición

¿A quién lees? ¿A quién crees?¿Te satisfacen las pocas noticias taurinas que publican los diarios madrileños? ¿Te convencen los comentaristas que hablan de toros por radio y televisión? ¿Las revistas especializadas cuentan la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad sobre la fiesta más brava?

El otro día, al caer el último morlaco, nos acercamos al bar El Albero, en la calle de Pedro Heredia, 22, muy cerca de la plaza, para tomar unas tapas y charlar de toros. Ahí encontramos el último ejemplar de La voz de la Afición, el boletín de la Asociación El Toro de Madrid. Estos aficionados sí que cogen el toro por los cuernos, aquí se habla con más valor que El Espartero.

Naturalmente, el boletín trata de la reciente huelga, que "ha destapado las verdaderas intenciones que ... tienen los profesionales: la autorregulación. Lo que significa el desmoche generalizado de los toros, que, a su vez, pasarían a poder lidiarse con tres años en lugar de cuatro". Se censura "la ilegal bajada de pantalones de la Generalitat valenciana" ante dicha huelga, y a la Confederación de Asociaciones Profesionales Taurinas (CAPT), que la convocó, se le manda "al mismo cuerno que quiere manipular".

Esta huelga se produce en parte porque "se está librando una sorda batalla subterránea" por los derechos de los toros en la televisión digital: los taurinos quieren conseguir 11 una posición dominante en el mundo de los toros con vistas a negociaciones posteriores". Esto no nos sorprende; la fiesta siempre ha reflejado la sociedad de su alrededor: "Hoy día vivimos un liberalismo económico mundial, muy darwiniano, donde sólo sobreviven los más fuertes. Y la afición no lo es, por mucha verdad que diga y represente".Entre las cartas de los lectores hay una de México que anima a esta agrupación de aficionados -la primera que, a nivel mundial, tiene presencia en Internet- a combatir contra "una fiesta light como la que vivimos de' hace mucho por acá". Al leer esto -y aun a riesgo de comprometer la sagrada imparcialidad del periodista- pedimos al camarero otra copa de rioja con que brindar.

Se despachan a gusto estos exigentes aficionados, no queda títere con cabeza. Hasta pudimos leer que en su loca juventud el actual secretario y portavoz de la denostada Unión de Criadores de Toros de Lidia acudía, "silbato en ristre, a la andanada del 3 y, ante cualquier atisbo de debilidad o falta de trapío del toro, pitaba desaforadamente acompañando la música de viento con palmas de tango". El articulista especula sobre la causa de "tan esperpéntica evolución y cambio de chaqueta".