Turbulencias en el Ajax

Luz, taquígrafos y un grave problema de insubordinación en el Ajax. Este equipo, que siempre se ha distinguido por el grado de cooperación y compromiso de sus jugadores con el club, asistió ayer a un incidente que de alguna manera explica el final de un ciclo en el Ajax. Dirk Bogarde, lateral izquierdo de la selección holandesa, se enfrentó al entrenador Louis Van Gaal después del entrenamiento y le comunicó que no acudiría a Callaanstoot, el lugar donde se recluirá el Ajax en la víspera del encuentro contra el Atlético, la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones. Bogarde, que apenas ha jugado esta temporada a causa de una lesión, le dijo a Van Gaal: "Soy demasiado bueno para estar en el banquillo". La reacción del técnico fue fulminante: apartó a Bogarde de la convocatoria, informó a la directiva de la actitud del jugador y luego lo comunicó a la prensa.Lejos del secretismo que muchas veces preside la política interna de los clubes españoles, Van Gaal detalló punto por punto a la prensa el incidente con Bogarde: "Me siento decepcionado, irritado, por el comportamiento de Bogarde, un jugador al que siempre he defendido, incluso contra la opinión de sus compañeros. Todos nos sentimos mal. Yo, los jugadores, los directivos. Bogarde sabe que desde hoy no puede mirar a la cara de sus compañeros".

Bogarde no dijo nada, pero protagonizó un nuevo incidente mientras se desarrollaba la conferencia de prensa de su entrenador. Después de negarse a contestar a las preguntas de los periodistas, arremetió contra un fotógrafo. Varios periodistas intervinieron para detener la gresca. Van Gaal pidió a la directiva que expulse a Bogarde del equipo e incluso que rescindan su contrato. En cualquier caso, el jugador tiene asegurado su futuro porque ha firmado un contrato con el Milan.

El proceso de desmantelamiento que sufre el Ajax está afectando al técnico: "Me cuesta mucha más energía mantener la motivación de los jugadores. Siempre me ha gustado comunicar y ahora resulta más difícil. Esta situación es un problema".

El Atlético, que partirá esta mañana hacia Amsterdam, acude dentro de un ambiente más pacífico y relajado. Sus preocupaciones son sólo deportivas. La principal es la ausencia de Kiko, que debe cumplir un partido de sanción. Antic tiene intención de entregarle su plaza a Caminero, mientras Aguilera es la opción más sólida para ocupar la de éste. La baja de Prodan -no puede actuar en Liga de Campeones al haberlo hecho ya con el Steaua-, inquieta menos. Su puesto lo ocupará Solozábal.

Y la otra gran preocupación de los rojiblancos es simplemente el Ajax. Antic ha creído descubrir en sus sesiones de espionaje cierta falta de ritmo competitivo en los holandeses y por eso sus directrices para el choque de mañana hablan de imponer un alto ritmo de juego. La presión se realizará muy arriba con la intención de qué los holandeses encuentren complicaciones para realizar su juego de toque desde la salida. Lo malo es que cuando el Ajax se ha visto en situaciones así ha recurrido al juego en largo y también lo ha hecho de cine. Con todo, pese a la velocidad de los tres puntas del rival, el Atlético prefiere esta opción, que viene a anunciar que Molina va a tener mucho trabajo lejos del área.

Y la otra inquietud se refiere más al partido de vuelta. Santi, Pantic, Roberto, Toni, Bejbl, Caminero, Pablo y Vizcaíno están a una amarilla de la sanción.