"El aire mediterráneo siempre ha sido bien acogido en Madrid"
A Ramón García Alcaraz (Cartagena, 1956) le gustan los artistas que provocan a la sociedad con su ingenuidad malévola. Por eso hace ocho años, cuando abrió una galería de arte en Valencia, no dudó a la hora de elegir el nombre de My Name's Lolita Art para el local. Cumplía también así con el deseo oculto de homenajear a VIadimir Nabokov y, de paso, hacerle un guiño a Marilyn Monroe cuando decía aquello de "My name is Lolita" en Los caballeros las prefieren rubias. Sus artistas ya están más cerca de llamarse Lola que Lolita, pero su galería de Madrid inaugurada en otoño lleva el mismo nombre porque todavía "hay gente que se siente incómoda ante la juventud".Pregunta. ¿Qué le decidió a inaugurar una galería de arte en Madrid?
Respuesta. Madrid es un gran bazar y desde aquí se controla todo el mercado nacional. Además, la feria de Arco ha conseguido que muchos galeristas tengamos clientes y coleccionistas en esta ciudad. Y no hay que olvidar la ventaja de las comunicaciones, algunos de mis clientes tienen más fácil comprar aquí que en Valencia. También la situación, con respecto a otras comunidades, es diferente por la excelente comunicación. Desde aquí se puede controlar todo el mercado nacional.
P. ¿Quién compra arte?
R. El arte tiene muy pocos compradores. El 90% de los cuadros que decoran las casas de los españoles han sido adquiridos en tiendas de muebles o de decoración, aunque sean más caros. Los clientes de las galerías tienen un sentido cultural de lo que hacen.
P. ¿Los bancos se han convertido en los mecenas del siglo XX?
R. Los bancos han sustituido a la Iglesia y la monarquía absolutista en lo que a consumo con mayúsculas se refiere. El pulso social y el criterio de compra de las grandes instituciones puede tener un componente de realidad social o suscribirse al criterio del profesional que está al frente del departamento. En ese sentido, creo que estos organismos deberían tener criterios más plurales.
P. ¿Los colores mediterráneos triunfan en Madrid?
R. El aire mediterráneo siempre ha sido muy bien acogido en Madrid. Muñoz Degrain, Sorolla y Cecilio Pla, por poner algunos ejemplos, sedujeron a la ciudad, pero también ellos quedaron cautivos de sus calles. Degrain fue presidente del Círculo de Bellas Artes y Sorolla tiene aquí su museo.
P. ¿Qué tendencias priman en los talleres?
R. Vivimos en un eclecticismo propio del final de siglo, pero creo que después de mucho conceptual las tornas han girado hacia la figuración de los años setenta, pero más simbolista y narrativa.
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