Protesta vecinal por la venta de pisos del Ivima
, Un centenar de vecinos de dos barriadas de San Blas con 1.730 pisos se concentraron ayer ante el Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) para protestar porque este organismo les quiere vender las casas donde viven sin antes arreglar ascensores y tejados. Todos pagan rentas mensuales de unas 300 pesetas desde los años cincuenta por pisos de unos cuarenta metros cuadrados, que en medio siglo serían suyos.
Consideran que si ahora el Gobierno regional les cobra de 200.000 a 300.000 pesetas por la venta anticipada de la vivienda, debe acometer los arreglos. El gerente del Ivima, Juan José Franch, asegura que el precio de venta lo fija la normativa. "Hay ya 894 vecinos que han comprado los pisos; además, los arreglos en ascensores y cubiertas son responsabilidad suya", afirma.
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