El Marsella pagaba 7,7 millones a los árbitros en la compra de partidos de la Copa de Europa

La compra de un árbitro en la Copa de Europa costaba al Olympique de Marsella 7.750.000 pesetas, según el informe de 250 páginas elaborado por el juez Philipon sobre las maniobras ilegales protagonizadas por los directivos del club francés durante el mandato de Bernard Tapie. En el informe se destacan varios hechos delictivos. Por ejemplo, un equipo ruso, parece ser que el Spartak de Moscú, se dejó golear a cambio de 56 millones. Los fraudes también fueron comunes en la competición francesa, como se comprobó en el soborno a varios jugadores del Valenciennes.

Excepción hecha del diario Le Monde, que descubrió una pequeña parte del contenido del informe del instructor, el resto de los rotativos parecen estar cansados de los escándalos sin fin que acompañan la lenta caída en desgracia de Bernard Tapie. En L'Equipe se preguntan por la fecha del juicio, que auguran para el 12 de mayo y esperan que "se exploren pistas que no siempre son completamente explorables". En Liberation constatan que el dossier reunido por el juez instructor es "apabullante para el equipo directivo reunido en torno a Bernard Tapie", pero de la misma manera que nadie duda sobre la realidad de las maniobras de corrupción protagonizadas por Tapie, tampoco nadie parece confiar demasiado en que se haga toda la luz sobre un asunto que debiera implicar otros personajes, jugadores, clubes, árbitros e instituciones. En Le Monde ven una contradicción entre "Ia querella del juez Philipon, que sólo tiene en cuenta delitos financieros, y sus investigaciones que parecen de mostrar que el sistema de falsas facturas puesto en marcha entre 1987 y 1993 sirvió para comprar partidos y árbitros". Para este diario es importante que Philipon haya llegado a cifrar en 101.410.266 francos -2.250 millones de pesetas- la cantidad desviada de las cajas del OM y utilizadas para todo tipo de corrupciones. En realidad, Philipon parece ser víctima de la falta de colaboración de otras instancias judiciales francesas, de las reticencias a la cooperación por parte de jueces de otros países y, sobre todo, del poco interés puesto por la FIFA para averiguar lo sucedido. Así, la FIFA se empeñó en que la Federación Francesa descalificase al OM para participar en cualquier competición europea y le condenase también a perder categoría, pero no hizo nada para poner en claro lo sucedido. Hoy, varios ex jugadores del OM triunfador de la Copa de Europa de 1993 siguen en activo pero no quieren hablar sobre la época. El OM, durante los seis años que estuvo en manos de Tapie, ganó cuatro Ligas, una Copa y una Copa de Europa. Compró y vendió decenas de jugadores y movió grandes sumas de dinero. Para Bernard Tapie fue una plataforma desde la cual lanzar su carrera política. Gracias a los éxitos deportivos pudo enraizarse en Marsella y llegar a Ministro de las Ciudades, cargo del que tuvo que dimitir precisamente por todos estos escándalos.