El Caja Cantabria triunfa sin Duishebáiev

El Caja Cantabria necesitaba rehabilitarse tras un mal comienzo de temporada. Y lo hizo de forma inmejorable: en casa y sin Talant Duishebáiev, lesionado para cuatro meses y fichado por el Nettelsted alemán para cinco años, ganó la Copa Asobal tras vencer en la final con facilidad al Prosesa Ademar de León. El portero sueco Mats Olsson demostró su enorme valía en los dos partidos. Los leoneses vencieron en semifinales (31-31, por penaltis) al invencible Barcelona por segunda vez en un mes; los cántabros fueron muy superiores al Elgorriaga (22-17), incapaz de suplir la baja de Perunicic.La final comenzó con malos presagios para los que buscaban gran balonmano por encima de emoción y triunfo: los nervios eclipsaban la calidad. Para colmo, Kiselev, que había tomado la tradicional batuta de Duishebáiev, sufrió dos exclusiones seguidas.

Pero la calidad y el juego vistoso aparecieron por sorpresa. Jakímovich tomó con éxito el mando de los cántabros. Pérez Canca demostró que la carencia de peso y estatura no impiden que la creatividad en ataque pueda romper a los armarios defensivos; su compañero, el veterano Kuzmanovski despertó de un letargo de varios meses. En general, el Ademar exhibió lo mismo que en la víspera ante el Barcelona: un bloque más temible por su homogeneidad que por la brillantez de sus figuras.

Sin embargo, pronto se vio el punto débil de un equipo tan ajustado como el Ademar; si su principal estrella (Skrbic) no está en forma el engranaje se resiente mucho. El Caja Cantabria amplió con facilidad la ventaja que ya tenía en el descanso (13-10) gracias al recital de Olsson bajo los palos (paró 6 penaltis) y al buen tono general, con matrícula de honor para Jakímovich.