Bonn negociará con EE UU el conflicto que enfrenta a General Motors y Volkswagen
El ministro alemán de Economía, Guenter Rexrodt, anunció ayer que negociará con su homólogo norteamericano las diferencias que enfrentan al grupo alemán Volkswagen y a la norteamericana General Motors, en el transcurso de la próxima cumbre de la Organización Mundial de Comercio, que se celebrará en Singapur del 9 al 13 de este mes de diciembre. Rexrodt expresó sus deseos de que "se aproximen los puntos de vista y que se encuentre una solución en interés de la industria automovilística alemana".GM y su filial alemana Opel acusan a VW de estar mezclada en el asunto del espionaje industrial que implica al español José Ignacio López de Arriortúa, que ha dimitido hace unos días como jefe de compras del grupo automovilístico alemán.
GM ha interpuesto una querella en Estados Unidos y en Alemania contra López y algunos de sus colaboradores así como contra los responsables de VW, incluido el presidente del directorio, Ferdinand Piëch.
Según el semanario Stern, la compañía de Detroit estima que López de Arriortúa se llevó más de 4.000 folios de información confidencial con los precios de unos 110.000 componentes de automóviles cuando dejó GM, en 1993, para pasarse a Volkswagen. Por ello, GM exigirá a VW una Indemnización de 6.000 millones de marcos (medio billón de pesetas) por espionaje industrial.
El grupo Volkswagen hizo ayer otro gesto de buena voluntad -tras aceptar la dimisión de López- al señalar que está dispuesto a expresar su pesar a GM por este asunto, pero sin llegar a presentar disculpas. En una entrevista publicada ayer por el diario Bild, el director de comunicación de VW, Klaus Kocks, estima razonable que la firma exprese "su más profundo pesar si eso no se interpreta como una confesión".
Por su parte, el semanario Die Woche afirma que altos responsables de VW y GM se han reunido en secreto el pasado 16 de septiembre en Londres para examinar las posibilidades de lograr una cooperación a nivel internacional en lugar de continuar la batalla jurídica. Según este semanario, no se habría tratado de ningún tipo de compensación económica por parte de VW, aunque en contrapartida se habría negociado una estrategia común en materia de compras e incluso la "creación de una fábrica conjunta de motores en un país del Tercer Mundo".
