"Es mejor que los jóvenes no hagan declaraciones"
Llegó al club con una misión: buscar una terapia contra el síndrome del último minuto, ese mal que hace que el equipo se hunda en el tramo final de los partidos. Ayer lo consiguió. Lobo Diarte entrenador del Atlético de Madrid B, apuntó en el casillero rojiblanco la primera victoria fuera de casa tres semanas después de su aterrizaje. Como jugador, fue un goleador nato. Zaragoza, Valencia, Salamanca y Betis fueron sus destinos en suelo hispano. Carlos Diarte, de 43 años, ha vuelto ahora a la Liga en calidad de entrenador: tiene contrato hasta junio para reflotar a un equipo en crisis.
Pregunta. ¿Cómo aterrizó en el Atlético B?
Respuesta. Yo siempre tuve algo en común con el Atlético de Madrid. En la época en que trabajé en una escuela de fútbol de Valencia les recomendaba jugadores. Cuando el equipo entró en crisis, Jesús [Gil] me llamó y no lo dudé. Yo dejé el Club Guaraní, el tercer mejor equipo de Paraguay, para venir a entrenar a España. Y la semana pasada me ofrecieron entrenar a la selección de Camerún. Yo quiero llegar lo más alto posible y pretendo estar en Primera cuanto antes, pero para eso tengo que trabajar.
P. ¿Cuál es la terapia contra el síndrome del último minuto?
R. No perder el balón, conservarlo y buscar la picardía. Además, nos hace falta machacar. Estamos trabajando para que haya una mayor coordinación en el juego y ahora hace falta que los jugadores memoricen los movimientos tácticos que deben realizar.
P. ¿La inexperiencia de sus jugadores es un problema?
R. Los jugadores que tenemos ahora habrán asumido la categoría en el plazo de dos años pero, mientras tanto, necesitamos gente experimentada para mantener al equipo en Segunda. Precisamos tres o cuatro jugadores con experiencia y si conseguirnos dos más, mejor.
P. Luis Fernández ha puesto una mordaza a los jugadores jóvenes. ¿Qué opina?R. Estoy de acuerdo con él. Los jugadores jóvenes necesitan un periodo de adaptación, es mejor que no hagan declaraciones. Deben aprender a jugar antes que nada.
P. ¿Qué opinión le merece la situación en Zaire?
R. Es aberrante que estas cosas pasen desapercibidas. No podemos dejar pasar eso, Occidente debe intervenir.
P. ¿Le gusta leer?
R. Soy un gran lector y también escribo poesía narrativa. Me gustan mucho mi compatriota Roa Bastos, Lorca y Beckett.
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