Karembeu será quien dedida: Madrid o Barça

La batalla por Karembeu sigue su curso entre los dos grandes. Hay mil millones en juego para la Sampdoria, y otros mil para el jugador, a repartir en cinco años. Y todos hablan, menos el interesado. Karembeu jugará con quien decida. Le ampara la legislación laboral, de la Unión Europea y no las normas de la FIFA. El Madrid sostiene que el jugador dirá no al Barça, que su representante les ha tranquilizado. El Barça reconoce que ha de hablar con Karembeu para cerrar el trato. Karembeu no ha dicho su última palabra.

El Real Madrid asegura estar tranquilo a pesar de la ofensiva en toda regla lanzada por el Barça sobre Christian Karembeu. Este sentimiento invadió a la directiva madridista después de que, según el club, recibiera la llamada del agente del futbolista. La respuesta fue clara: Karembeu se ha comprometido con el Madrid y así se lo hará saber a la Sampdoria y al Barcelona. El jugador viajó ayer a París donde el próximo jueves se incorporará a la concentración de la selección francesa que el domingo se enfrenta a la de Dinamarca en Copenhague. En la capital francesa es donde el Barcelona intenta realizar el primer contacto con el jugador.Lorenzo Sanz, presidente del Real Madrid, tiene en su poder, aunque no pueda reconocerlo oficialmente para evitar problemas con la UEFA, el contrato que hace diez días firmó Karembeu en la habitación 323 del hotel Berges de Ginebra. Nadie vio al jugador y todas las partes niegan el encuentro. Igual secretismo rodea a la visita que directivos del Madrid realizaron a una entidad bancaria para hacer efectiva una cantidad importante de dinero.

El Madrid se resiste a reconocer no sólo que ha firmado un contrato con el jugador si no que ha podido adelantar una cantidad de dinero a cuenta. Si Karembeu se niega a fichar por el Barça, la Sampdoria podría denunciar al Madrid ante la UEFA. La Sampdoria está interesada en que el jugador alcance un acuerdo con el club azulgrana ya que recibirá 900 millones de pesetas, cantidad que la entidad madridista no está dispuesta a pagar por un jugador que acaba contrato el 30 de junio de 1998. El Madrid ofreció 500 millones. Y la Sampdoria no lo tiene del todo claro: si el jugador no quiere ir al Barcelona, se verá obligado a negociar a la baja con el Madrid porque, de lo contrario, corre el riesgo de no recibir dinero por el jugador.

Si Karembeu se mantiene próximo al Madrid y comienza la batalla legal, el jugador puede iniciar un pleito por defender sus derechos como trabajador. Jean Louis Dupont, el abogado de Jean Marc Bosman, analizó ayer a preguntas de EL PAÍS la situación: "El derecho laboral nacional e internacional permiten a un trabajador negociar su futuro profesional. El contrato que Karembeu podría haber firmado con el Madrid es válido, lo demás es papel mojado. Él y nadie más está en su derecho a negociar algo que le pertenece como es su futuro profesional".

En este sentido parece que la normativa de la FIFA y UEFA que impide a los jugadores con contrato en vigor llegar a compromisos con otros clubes también ha quedado anticuada con la sentencia Bosman. El Madrid conoce esta situación legal pero cree que no será necesario recurrir a ella.

El vicepresidente azulgrana Joan Gaspart contactó ayer con Milam Kalasam, el agente de Karembeu, para entablar la negociación con la máxima celeridad e intentar en las próximas horas cerrar el acuerdo para que el jugador francés se incorpore al Barcelona. La reunión, que podría celebrarse fuera de España, se concertó con el máximo sigilo. El club azulgrana pretende ofrecer a Karembeu un contrato por cinco temporadas y una ficha que ronda los cien millones de pesetas, libres de impuestos al año. "Él decidirá si quiere venir. Los jugadores no son esclavos: son dueños de su futuro", dijo el domingo Joan Gaspart.

El Barça tiene muy claro que ha actuado conforme a las disposiciones de la FIFA. "Si alguien ha intentado fichar correctamente a este jugador hemos sido nosotros", afirmó ayer Josep María Antras, portavoz de la junta directiva del club azulgrana que ayer celebró su reunión mensual. Pero también hay dudas en el Barça en tomo a la decisión que finalmente tomará el jugador. No gustó la sospecha de que el Madrid ha adelantado 100 millones, aunque Gaspart, antes de que la junta se reuniese, afirmó: "No puede ser cierto. Sería asumir un riesgo muy delicado por parte del Madrid. Y los dirigentes madridistas saben que esto no lo pueden hacer".

La directiva azulgrana se ampara en el reglamento sobre los derechos y deberes de los futbolistas establecido por la FlFA en enero de 1994. El artículo 13 de esa norma especifica: "Un club que quiere los servicos de un jugador tendrá la obligación de comunicar su interés al club actual antes de iniciar cualquier contacto con el jugador". Y prosigue afirmando que toda "violación" de ese artículo será trasladada a la comisión disciplinaria de la FIFA. El artículo 12 autoriza a los jugadores a contactar con otro club sólo seis meses antes de que expire el que tiene en vigor o cuando sepa que no será renovado.

Gaspart advirtió que si el Madrid quiere contraatacar fichando a Figo, Raúl "será azulgrana. No ha llegado todavía el día de los Inocentes".