El Inem

Soy una de las miles de paradas que existen en España. Estoy en esta situación desde el 15 de junio de 1995. Tengo 48 años y he cotizado a la Seguridad Social ininterrumpidamente desde el año 1966.Desde el día en que el Inem me dió de alta en su ya famosa lista de parados, en espera de un puesto de trabajo, he comparecido a todos los controles trimestrales establecidos. Esta oficina no me ha ofrecido ningún trabajo, ningún curso de formación ocupacional... Soy una trabajadora que, en pleno rendimiento profesional, mi empresa, "haciendo uso y-abuso" de la reforma laboral, me "desplazó" a otra ciudad, injustificadamente, como más tarde ha dictado una inspección de trabajo ordenada por una juez.

Hasta- aquí, una historia más en el panorama laboral de nuestro país. Pero mi gran sorpresa ha sido cuando he recibido una carta del Inem de Moratalaz, al cual pertenezco, firmada por la directora de esta oficina, diciéndome que acudiera el día 15 de octubre con mi DNI para la verificación de mi situación como demandante de empleo... Si no comparecía, justificadamente, se me amenazaba con la pérdida de la prestación durante un mes. Cuando llegué me hicieron introducir mi DNI en un ordenador que me decía que al día siguiente, a otra hora diferente, debía repetir la misma visita con la misma amenaza de no hacerlo. Volveré a introducir mi DNI y a su vez saldrá otra hora diferente para el día siguiente, y así hasta quince días o más. Una vez que la nueva cita obra en mi poder, debo comparecer ante un funcionario para que constate o compulse este documento y así vea que soy yo y no otra quien se somete al control... Debo conservar todos los controles diarios por si se me piden después.

Sinceramente, yo creía que el Inem estaba para gestionarme un empleo adecuado a mi nivel profesional, porque ¡yo quiero trabajar! Mis conocimientos están homologados con la actividad contemporánea de una empresa. Pues, por lo visto, es el sistema de control antifraude del Inem. El Estado, a través del Inem, declara a una trabajadora en libertad condicional y le obliga a comparecer a una hora diferente cada día durante más de quince días.

Por el hecho de no trabajar, tengo que cuidar de mi casa y de mi hijo de seis años. Llevarle y traerle al colegio cuatro veces al día; teniendo en cuenta que si estoy en casa es porque un empresario desaprensivo, aplicando la legislación actual, se ha desprendido de una trabajadora porque deseaba liquidar su empresa a través de una "quiebra fraudulenta" encubierta. Señor director, no podría imaginar mayor humillación para una trabajadora, en suma, para una ciudadana. Disponer del tiempo de una persona y fiscalizar el horario de un ama de casa.

El mismo día 15 de octubre se ha divulgado en los medios de comunicación que una comisión en el Senado se iba a ocupar de la investigación de la economía sumergida en España. Yo recomiendo a sus señorías que el Inem tiene la mejor de las herramientas...

Madrid.