El Ayuntamiento aprueba sacar los coches de la Casa de Campo

VIENE DE LA PÁGINA 3El alcalde, José María Álvarez del Manzano, siempre negó esta posibilidad. Hasta el pasado viernes, cuando, junto a su grupo municipal, apoyó con su voto la restricción paulatina del tráfico en la Casa de Campo.

Los redactores del plan especial del parque -pertenecientes a una empresa privada que ha cobrado 14 millones- reconocen que los coches son "un continuo origen de conflictos al favorecer el deterioro del medio". Tras el diagnóstico, concluyen: "Parece razonable su eliminación".

La propuesta, al estar incluida en el nuevo Plan General, deberá esperar, para entrar en vigor, a que éste se apruebe de forma definitiva, lo que ocurrirá a mediados del próximo año.

El plan propone cortar las vías de acceso a la parte forestal, cerrar la carretera de Rodajos y cortar la glorieta de Siete Hermanas (ver gráfico). "Las carreteras de la zona norte [correspondientes a la parte forestal] se clausurarán de manera inmediata", explica José Ignacio Gómez Cuesta.

En el área de ocio, el tráfico de paso se eliminará paulatinamente para evitar problemas mayores. "No se puede olvidar que los accesos a Madrid desde el Noroeste y el Suroeste constituyen un grave problema que, de aplicarse la supresión [del tráfico de paso], no haría sino agravarse". La restricción, según la propuesta aprobada, "sólo se llevará a efecto después de mejorar dichos accesos, por lo que, quedaría condicionada a la construcción del desdoblamiento de la carretera de Boadilla y de la de Campamento.

El plan prevé acoger a los usuarios de las instalaciones de ocio en los aparcamientos que se recuperarán junto a la feria del campo. Y si no fueran suficientes, se acondicionarían los estacionamientos que ya existen en el paseo del Batán, en la carretera de Rodajos al puente del Batán y en las proximidades de la puerta del Robledal.

El plan especial de protección del mayor parque de Madrid invalida una idea municipal, aprobada hace dos años por el PP. Aquella propuesta llenaba de cemento el parque. Permitía la construcción de un pabellón de hielo, un palacio de deportes, un museo, un campamento juvenil, un parque de aventuras y otro festivo; además de ampliar los aparcamientos y restaurantes existentes.El PSOE amenazó con presentar una denuncia por atentado ecológico si se mantenían los proyectos, y Esperanza Aguirre, entonces primera teniente de alcalde, dio marcha atrás.

El nuevo plan, que incluye 150 medidas, olvida la construcción de inmuebles y se fija en la inseguridad ciudadana. Propone la erradicación de la prostitución y la droga y el aumento de policías. También sugiere la creación de un equipo especial para la extinción de incendios compuesto por 24 personas, dos vehículos contra fuegos y un todoterreno de apoyo.

Para mejorar las opciones recreativas se plantean merenderos con fuentes, papeleras suficientes y contenedores selectivos. Se situarían en cinco zonas: glorieta de Cuatro Caminos, Repartidor, final de la carretera del Teleférico, glorieta Perdida y Puerta del Zarzón. También se prevén dos nuevos evacuatorios -sólo queda uno en el parque; el otro que existía fue tapiado en octubre de 1994- La propuesta plantea dos alternativas: evacuatorios de cabina (como los que hay en la ciudad) o convencionales, con una persona a su cargo que cobraráa entrada (25 pesetas por persona). Se instalarán junto al puente del Batán y la Puerta del Robledal.

Por último, se crearán los jardines de los olores, los sonidos y los sabores; se reparará el cerramiento exterior del parque, y se ampliará el número de hidrantes y bocas de riego.