_
_
_
_
Entrevista:

Los madrileños visitan más el Reina Sofía que el Thyssen

Trabaja en un despacho extrañamente sencillo para un enclave tan grandioso como el que guarda la colección de los barones más populares de España. Tomás Llorens (Almassora, Castellón, 1936) fue director del Centro de Arte Reina Sofía, antes de ocupar en 1991 su actual cargo de conservador jefe del museo de la Colección Thyssen-Bornemisza. Recién publicada la memoria que resume la vida de este museo en sus primeros cuatro años, sabemos que han pasado por allí más de dos millones de personas, con una caída de 30.000 visitantes en 1995, y que los madrileños no copamos más que el 26% de las visitas. Llorens llegó a Madrid para terminar Derecho y empezar Filosofía y Letras, y con filosofía interpreta las citadas cifras, asegurando que un museo, como tantas otras manifestaciones de la vida cultural tiene una curva de maduración que desciende según se desvanece la sensación de novedad.Pregunta. ¿Le inquieta que los madrileños visitemos poco el Museo Thyssen?

Respuesta. No debe interpretarse así. Ocurre con todos los museos de Madrid y de las grandes ciudades del mundo. Entre las categorías de los visitantes hay varios grupos: estudiantes, escolares, jubilados y, la más importante, turistas. Los museos más concurridos son los de1as ciudades propicias al turismo cultural. París, Londres, Nueva York, Venecia, Amsterdam y luego Madrid.

P. ¿El Prado es el mejor museo del mundo?

R. Es uno de los dos o tres mejores.

P. Usted dirigió el Reina Sofía, ahora el Museo Thyssen. Con el Prado cerraría el llamado "triángulo del arte".

R. ¿Trabajar en el Prado? No me lo he planteado. Es una institución especial y muy difícil.

P. El ritmo del Reina Sofía y el del Museo Thyssen deben ser muy diferentes.

R. Absolutamente. Sólo por su tamaño, el Reina Sofía es un animal de otra especie. Su actividad de exposiciones temporales es muy importante respecto a la colección permanente. Aquí sucede al revés. El público del Reina Sofía es mucho más joven, y lo visitan bastantes más madrileños.

P. ¿Eso le convierte en un museo más vivo?

R. En absoluto. La vida de un museo se mide por su contacto con el público y con los servicios que ofrece.

P. ¿Cómo es su relación con los barones?

R. Cada vez más estrecha.

P. ¿Madrid es una ciudad privilegiada para el arte?

R. Sí. De Madrid me encanta lo que tiene de gran ciudad y me desagrada lo que conserva de pueblo. Admiro sus museos, pero me irrita la insuficiencia de sus aeropuerto, estaciones y sus deficientes autopistas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_