ERÓTICO FÚTBOL
Un empleado genovés de 45 años ha pagado 250.000 liras, unas 20.000 pesetas, a una prostituta colombiana cuyos servicios se limitaron a ver con el cliente el partido de la Eurocopa entre Italia y Rusia. Nuestro hombre, casado y cliente habitual de la trabajadora del sexo, decidió contratar a la colombiana para que le acompañara en el excitante momento de animar a los chicos de Arrigo Sacchi. Visto que un número apreciable de norteamericanos han declarado en una investigación que les resulta eróticamente gratificante escuchar el himno nacional, ¿por qué no entretenerse viendo jugar a la patria selección de fútbol? Por lo que respecta a la esposa del genovés, no le queda siquiera alternativa de cantar, como Gelu, "quizá, quizá, tú me mientes al decir que vas al fútbol".-
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