Seattle intentará plantar cara a Chicago
Los Seattle Supersonics han hecho algo que sólo ocho equipos de la NBA consiguieron en esta temporada: batir a los Chicago Bulls. Los Sonics que alcanzan la final de la NBA por primera vez desde 1979 derrotaron a los Bulls, 97-92, el pasado 26 de noviembre. Los Bulls jugaron ese partido sin Dennis Rodman, lesionado. Ambos equipos se volvieron a encontrar el 10 de enero en Chicago. Los Bulls arrasaron a los Sonics, 113-87. Los hombres de George Karl jugaron sin el alemán Detlef Schrempf. Hoy se verán las caras en el primer partido de la final (3.00, Canal +).Durante la temporada regular, las 64 victorias conseguidas por Seattle son el mejor registro de victorias por detrás de los Chicago Bulls. El récord de triunfos caseros de los Sonics, 38, es también segundo detrás de los Bulls con 39. En definitiva, los Sonics son quizás el único equipo de la Liga capaz de plantear una opción real al título. Un reto a unos Chicago Bulls que, si consiguen la victoria final, habrán hecho historia en la NBA.
Favorito: El favorito está cantado: Chicago. Las apuestas no se cruzan para elegir el campeón sino para adivinar en cuántos partidos acabará Chicago con Seattle. Las claves de los Bulls son conocidas: defensa, agresividad, versatilidad en ataque, intercambio posicional demoledor. El mejor dúo de la NBA: Jordan, Pippen. El mejor reboteador: Dennis Rodman. El mejor sexto hombre: Toni Kukoc. Los Bulls tienen un excelente técnico: Phil Jackson. Son ganadores y están motivados para culminar una temporada inolvidable.
¿Cómo batir a los Bulls?. En las 11 derrotas de Chicago esta temporada los oponentes de Chicago anotaron el 46% de tiros de 3 comparado al 32%,en los 83 partidos ganados. Los Bulls defienden muy fuerte el juego interior y los Sonics tendrán que tirar muy bien desde el perímetro.
Rapidez. Cuando un rival tiene bases pequeños y veloces, los bases de los Bulls (Jordan y Pippen miden dos metros) tienden a sufrir. Payton reúne esas características. El base de los Sonics anotó 26 puntos y 11 asistencias en la victoria de Seattle frente a los Bulls en temporada regular.
Desequilibrar al gusano: Rodman vive y juega al límite. A veces, sobrepasa ese límite. Constantemente se enfrenta a los árbitros. A menudo busca la confrontación con sus rivales. Es una bomba de relojería en un equipo.
