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La guerrilla krahn libera a 78 rehenes tras el alto el fuego en Liberia

Los guerrilleros del Movimiento Unido de Liberia (Ulimo), de la etnia krahn, liderados por Roosevelt Johnson, liberaron ayer a 78 rehenes, libaneses en su mayoría, retenidos desde hace dos semanas. Esta liberación es el primer paso para la implantación del alto el fuego acordado el viernes en la Embajada de Estados Unidos en Monrovia entre las dos facciones liberianas en conflicto, los krahn y los mandinga.

Los rebeldes de Ulimo mantienen aún a varios centenares de extranjeros retenidos en el centro de entrenamiento de Barclay, donde los han utilizado como escudos humanos para frenar el avance de las tropas leales del general Charles Taylor. Se han producido brotes de cólera entre los retenidos.Cuatro navíos estadounidenses llegaron ayer a aguas de Liberia con 1.500 marines, vehículos de asalto y helicópteros de combate para colaborar en la pacificación del país africano. El objetivo es que la mayor parte de estos efectivos permanezcan en los navíos. Unos 190 sí desembarcaron y se dirigieron a la Embajada de EE UU. Los 1.500 marines proceden, en su mayoría, de bases estadounidenses europeas. Fuentes norteamericanas destacaron que los marines no tienen orden de proteger la embajada ni de evacuar extranjeros, sino de ofrecer ayuda humanitaria.

El alto el fuego del viernes se logró con la mediación de EE UU y de las Naciones Unidas. La fuerza de pacificación de África occidental inició, tras el alto el fuego, su despliegue. El primer problema que enfrentará es la total devastación de la capital, donde se ha concentrado la mayor parte de los combates, que comenzaron el día 6.

Uno de los rehenes liberados, ayer, un paquistaní que llegó a la Embajada de EE UU en Freetown con su mujer y sus tres hijos, narró que lo peor de su estancia como rehenes en Barclay fue la carencia de alimentos y de agua, lo que desató los brotes de cólera. Sus captores les dijeron que podían irse pero salir de allí sin la garantía del alto el fuego era más que inseguro.

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