El Athletic toma oxígeno en Valladolid
Empatar en casa, a estas alturas de temporada, cuando los puntos suponen un sacrificio extenuante, comienza a ser mal negocio para el Valladolid. Para el Athletic, el empate conseguido en Zorrilla es oxígeno en un momento en que el equipo de Amorrortu parecía haber perdido el aire. Todo lo que no ocurrió en 80 minutos de partido se desparramó en un instante con los goles casi simultáneos de Guerrero y Peternac, que dejaron la refriega en un sinsabor para el Valladolid y en un oasis de felicidad para el desierto futbolístico que es hoy el grupo de Bilbao.El Athletic comenzó el partido, con la consigna de proteger la posesión del balón y encomendó sus esperanzas a un ejercicio de paciencia que le llevó a tener controlado el partido desde su inicio. La mesura, sin embargo, le duró muy poco, y el primer disparo a puerta, errado por Julen Guerrero cuando se había quedado solo delante del portero vallisoletano, redujo a cenizas la virtud expuesta hasta ese momento y la convirtió en un estado de nervios que le duraría al Athletic todo el partido.
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