Luz y tinieblas en el Manzanares

Es la calma contra el alboroto; la alegría, frente a la depresión. Así llega el derby de esta noche (Vicente Calderón, 20.30. autonómicas y La 2), un cita decisiva para la resolución el campeonato. El Atlético aparece convencido de la cercanía del título y envuelto en un apacible ambiente de tranquilidad. El Madrid se presenta roto por dentro, desunido y caído de ánimo y juego. Los dos se juegan mucho: el anfitrión, un trocito del título; el visitante, sus opciones de acceder a Europa. A falta de grandes declaraciones, el mayor sobresalto del derby lo provocó una decisión táctica: Arsenio no convocó a Sanchis. Será un duelo en el que dos equipos vivirán en la frontera: en la del éxtasis los de Antic, en la del infierno sin Europa los de Arsenio. Un derby de luz y tinieblas.

El Atlético recuperó color en Vallecas. Goleó al Rayo, reforzó su liderato y, de paso, apagó las dudas que empezaba a despertar su juego. La plantilla se dio un baño de autoconfianza. Sin embargo, lo de entonces no elimina necesariamente un dato nocivo para el campeón de invierno: ha sumado cuatro puntos de los últimos 12 jugados en el Calderón. Donde se ha torcido últimamente el Atlético es precisamente en su propia casa.Pero ningún jugador ha querido reparar en su pasado reciente como equipo local. Todos los rojiblancos están seguros de la victoria. Y aunque ninguno se atrevió a expresarlo abiertamente en público, le tienen ganas al rival. El Atlético sólo lamenta una baja, la del sancionado Biaggini, y no afecta a su alineación titular.

Los dolores de cabeza del Madrid no dependen del factor campo. Le aparecen tanto en el Bernabéu, como lejos de él. Lo del Madrid es un mal global que sigue en fase de crecimiento. Una cruz de los blancos, por ejemplo, es la lista de lesionados, aunque ha mermado: Quique, Redondo, Rincón, Amavisca, Esnáider... Y por si fueran pocas ausencias, también la de Sanchis, aunque ésta por exclusiva decisión táctica. "¿Sanchis? No, no, no está lesionado", explicó Arsenio. "Reapareció el otro día [el miércoles, ante el Racing]. Llegaba de una lesión, que le ha obligado a estar un cierto tiempo sin competir...". El jugador rechazó "pagar los platos rotos" de la crisis del equipo y añadió: "A la gente le gusta la novedad, los chavales. Es ley de vida. Es normal que vayan entrando en el equipo".

Otro de los problemas que acumula el Madrid procede de la relación equipo-afición, cuyo creciente deterioro vivió ayer un nuevo episodio. La ira de la hinchada señaló esta vez hacia Zamorano, que se había encargado de arrojar dinamita a la semana al reconocer sus negociaciones con el Atlético. El público de la Ciudad Deportiva respondió a golpe de pancarta. Con una ofensa directa: "Zamorano, paquete, vete ya, no le renovéis". Y halagos para la competencia: "Esnáider es un crack, no se vende". Finalmente, el club obligó a que las pancartas fueran debidamente plegadas.

El chileno no quiso ayer hablar más de su relación con el Atlético. Arsenio Iglesias tampoco, pero por si acaso le recordó al jugador sus obligaciones: "¡Qué le voy a decir ... ! Que se olvide de todo hasta el 30 de junio. Somos profesionales, yo también, y con contratos firmados. No hay más vueltas que darle".

Alineaciones:

Atlético: Molina; Geli, Santi, Solozábal, Toni; Caminero, Vizcaíno, Pantic, Simeone; Kiko y Penev.

Real Madrid: Cañizares; Luis Enrique, Fernando Sanz, Alkorta, García Calvo, Lasa; Milla, Hierro; Laudrup, Raúl; y Zamorano.

Árbitro: Carmona Méndez.