Lippi 'encierra' a la Juventus en un hotel del centro de Turín

La Juventus comenzó ayer un encierro de cuatro días en el hotel Citea, del centro de Turín, para preparar su encuentro de cuartos de final de la Liga de Campeones del próximo miércoles frente al Real Madrid (1-0 en la ida). La histórica medida -es la primera vez que la Juve se concentra tanto tiempo de cara a un partido- se interpreta como un castigo a los jugadores de un equipo que perdió (3-2) el viernes en un amistoso frente a un conjunto de Tercera, el Carrarense. Los jugadores de la Juve pasarán así la jornada de hoy de huelga del fútbol italiano.Los jugadores del campeón de Liga italiano pasarán unos días de vida monacal, como en un convento. Su único solaz será la visita de la prensa, prevista para una única hora diariamente. El entrenador de la vecchia signora, Marcello Lippi, se enfadó mucho tras la derrota en Carrara, entre otras razones porque él es natural de esa provincia.

La estrella juventina, Gianluca Vialli, que no pudo jugar por lesión el encuentro de ida, no sólo se encuentra plenamente recuperado -jugó los 90 minutos frente al Carrarense-, sino también lenguaraz e irónico. El presidente de la federación, Matarrese, le llamó "Robin Hood" por su apoyo a la huelga de futbolistas y Vialli le ha respondido: 'Si yo soy Robin Hood, él es el sheriff de Nottingham".