"No hay problema de balones"
Las federaciones españolas no temen a los inspectores de la UE
"España no tiene problemas de balones", aseguraron en la Federación de Fútbol al conocer que inspectores de la U E registraron por sorpresa las federaciones de Inglaterra, Francia y Dinamarca en busca de comisiones ilegales para la FIFA por el uso obligatorio de una marca en partidos de sus Ligas. "Nos pueden inspeccionar cuando quieran. Cumplimos la norma", aseguró un portavoz"."Los balones deberán reunir las condiciones, peso, medidas y presión que determinen las Reglas de Juego y el club habrá de tener tres de aquéllos dispuestos para cada partido, controlados por el árbitro", ordena la norma, que no estipula marca. Dirigentes de clubes de categorías inferiores reconocieron que los árbitros suelen hacer la vista gorda. Uno de ellos aseguró: "Les basta con que el balón esté en buen estado". En Primera y Segunda se impone que el balón sea nuevo.
La Liga Profesional llegó a un acuerdo con la empresa Adidas por el que le suministra 3.500 balones por temporada. Cada club de Primera y Segunda División recibe gratis 75 balones y tiene una rebaja superior al 25% por cada pieza que compre, que suele valer 4.500 pesetas. Los clubes participan además en los royalties de los balones, que proporcionan entre 15 y 20 millones. La Liga se limita a declarar "oficial" el balón de esa marca. Pero no hay pago de cánon por balón.
Adidas ha extendido sus tentáculos a la Federación Española, con la que renovó hasta marzo de 1999 su contrato por el que sus selecciones lucen indumentaria de esta empresa. A cambio Adidas paga 500 millones en metálico y otros tantos en material, en el que se incluyen los balones necesarios.
En las Ligas de Segunda B y Tercera no exige una determinada marca de balón. Pero sus clubes tienen que comprarse los balones en la tienda. "Casi todos los balones que utilizamos son de Adidas. Nos cuesta unas 6.000 pesetas cada uno. Nuestro presupuesto en balones es de unas 400.000 pesetas por año", reconoció Felipe Martínez, gerente del Numancia, el equipo revelación de la Copa.
La Asociación de Clubes de Baloncesto (ACB), por otro lado, tiene firmado un contrato con la marca de balones Molten por tres temporadas, hasta 1997. La ACB recibe una cantidad económica y los clubes 20 balones por año, número con el que cubren sus necesidades. Cada club suele disponer de diez a doce balones para cada partido, cuyo precio es de unas 12.000 pesetas y no tienen que ser necesariamente nuevos. De hecho, los jugadores prefieren los usados.
La Asociación de Clubes de balonmano (Asobal) tenía un acuerdo con Adidas, roto cuando el Comité Olímpico Es pañol obligó a los equipos nacionales a jugar con camisetas Kelme en Barcelona 92. Asobal, sin embargo, mantiene acuerdos parciales con Adidas, que abastece a los clubes. Adidas es el balón oficial de su Liga y su precio ronda las 7.000 pesetas. Cada club necesita 30 ó 40 balones por temporada, aunque la normativa obliga sólo a dos disponibles por partido. La Federación Internacional (IHF), por su parte, mantiene' acuerdos con Adidas, que es el balón oficial en sus competiciones. En las competiciones continentales de clubes, sin embargo, cada club decide el balón.
La Federación Internacional de Tenis, la ATP y la WTA tienen una serie de marcas de pelotas homologadas para sus torneos. Después, cada club organizador o cada federación nacional decide el tipo de bolas que utiliza, para la celebración de sus competiciones. Tanto los clubes como las federaciones suelen llegar a acuerdos con las distintas marcas para la compra de pelotas a precio inferior al de mercado. Durante un partido oficial de un torneo grande o de la Copa Davis, las bolas se cambian al cabo de siete juegos por primera vez, y después cada nueve. En una eliminatoria de Copa Davis se utilizan 75 docenas de bolas. En los Internacionales Femeninos de España, unas 225 docenas. Y en el torneo de Roland Garros, perteneciente al Grand Slam, unas 40.000 bolas.
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