_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Los candidatos

Echo un vistazo a la lista de los serán primeros candidatos de mi provincia, de mi barcelonesa provincia: se trata de un auténtico repóquer de ases, gente toda ella muy preparada para subsanar la principal herida de la política contemporánea, vacía de ideas y, por tanto, en la perenne expectativa de un hombre. Confieso que estoy emprendiendo gestiones muy activas para ver si puedo votar a los cinco. Mis noticias indican un regocijo semejante en las otras provincias: renovación, imaginación, talento oral y escrito... Estamos ante una auténtica generación. Un nuevo 98. Muy dedicado desde niño a la observación y estudio de la rareza, me sorprendió siempre que los políticos diseñadores y própagandistas del pesamiento único, de la flexibilidad la boral, de la omnipotencia del mercado, del fin de la ultraprotección social, los, políticos cantores de la imposibilidad de asegurar jubilación sin reforma, es decir, sin rebaja, no aplicaran a sí mismos beneficios semejantes. Me sorprendió que la clase política española se pareciera antes a un escaparate soviético que a un comercio milanés de la Vía Madonnina; que sus viejitos disfrutaran de una crepuscular marbella en los asientos del Senado -un reducto, por cierto, donde la optimización de los recursos es característica-, en los asientos de ignotas presidencias parlamentarias o en los sillones de, muchos consejos administradores; o que a su lenguaje, sus actitudes o a su eficacia no se le aplicara, en fin, el mismo criterio que a los escritores, los futbolistas o al tornero ajustador. Pero como tantas otras veces, no ha lugar a mi sorpresa: como hubiera dicho el viejo Pangloss, los políticos que existen son los mejores políticos que pueden existir. ¿A qué pues, aplicarles el destino precario, la vacilación que rige la vida de los hombres? Se merecen un cheque en blanco.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_