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Telediario con estufas

Matías Prats, Ana Blanco y Ramón Pellicer sobrevivieron ayer a una prueba difícil. Presentaron sus telediarios fuera de los estudios, en el gélido ambiente creado por la copiosa nevada caída sobre Madrid y transformada después en viento y lluvia. ¿Motivo? Dar mayor realce a la cumbre europea de Madrid. El estudio improvisado no fue situado en ninguno de los lugares donde se reunían los mandatarios, sino en la terraza del Ministerio de Obras Públicas y Transportes, donde no hubo reunión alguna de la cumbre.Aunque hicieron de tripas corazón, los tres presentadores de los telediarios de TVE trabajaron más pendientes del reloj, para ver cuándo acababa el suplicio, que de las noticias a las que daban paso.

Todo empezó cuando "el equipo de informativos" decidió sacar los telediarios a la calle. Así lo ha hecho en otros acontecimientos de este tipo, "para dar una imagen distinta de Madrid, otro punto de vista de la ciudad", según uno de los responsables del área de Internacional de la cadena. Nadie esperaba que ayer se convirtiera en el primer día que nevaba en Madrid desde hacía años, pero la decisión tampoco fue cancelada a la vista de que la nieve empezaba a cuajar.

Para mitigar el frío, los técnicos de Televisión Española pusieron calefactores, radiadores y estufas rodeando el set. Hasta el momento de salir al aire, pudieron disponer incluso de mantas de las que, con gran pesar, tuvieron que desprenderse al comienzo de los telediarios. Ana Blanco salió con un abrigo, mientras Matías Prats, utilizaba un jersey bajo la chaqueta. Fueron los primeros en sorprender a los espectadores con sus narices coloradas y el aliento cortándose en el aire en el Telediario-1, cuando todavía nevaba en varias zonas de Madrid.

Ramón Pellicer, antes de desplazarse a la terraza frigorífica para presentar la segunda edición del Telediario, se compadecía en Torrespaña de sus compañeros: "Daban la impresión de estar muriéndose de frío", comentaba, mientras elevaba plegarias por sí mismo para lo que le esperaba horas después.

Para cubrir esta cumbre europea, Televisión Española ha movilizado en total a cerca de 250 personas, distribuidas entre el Parque Juan Carlos I, donde están los mandatarios de la UE, el Palacio Real y la terraza del Ministerio de Obras Públicas. Si nadie lo remedia, hoy le toca la nevera al último premio Planeta, Fernando G. Delgado. Las estufas estarán esperándole.

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