En busca de la coalición

Con la intención de modular su discurso en este terreno, el Círculo de Economía está realizando consultas con los portavoces de los partidos en el Congreso. En la última semana, Rodrigo Rato, del PP, y Joaquím Molins, de CiU, han mantenido reuniones con la junta de la institución y mañana lunes será el socialista Joaquín Almunia quien evacue consultas con los empresarios. Estos contactos han desvelado que el PP sólo estaría, dispuesto a mantener el equilibrio con los nacionalistas después de marzo si CiU acepta la coalición. Los, empresarios quieren intermediar como sea el entendimiento entre conservadores y nacionalistas. Saben que, con respecto a Madrid, Jordi Pujol mantendrá su dialéctica de soporte y distanciamiento sin concreciones que le hipotequen. Pese a ello, han abierto una vía al entendimiento por el extremo más dialogante de la coalición -el de Molins- y para ello cuentan con el apoyo de los democristianos, la Unió Democrática de Duran Lleida.A criterio de los empresarios, el PP y CiU están obligados a poner por delante sus coincidencias económicas y a limar sus enormes diferencias en materia de política lingüística y autogobierno. "La corresponsabilidad fiscal demostrada por el PP en las administraciones territoriales que gobierna y la política de administración única iniciada por Manuel Fraga avalan estas coincidencias de fondo", explica. Juan Rosell a este diario. Piqué añade la urgencia de resolver el calendario: "La incertidumbre provocada por la prórroga del presupuesto se puede despejar en parte si el nuevo Gobierno a partir de marzo resuelve un decreto de medidas urgentes capaz de y mantener la reducción del déficit, y de ahí la importancia de que CiU y PP sean capaces de aproximar sus posturas".