Los laboristas británicos apoyan en masa la línea centrista de Blair

Las tormentas internas y externas han dañado escasamente la imagen del líder laborista británico, Tony Blair. Al contrario, su impulso modernizador aparece más legitimado que nunca a la vista de una última encuesta, en la que se refleja un creciente apoyo electoral al sesgo centrista que ha tomado el partido.En vísperas del congreso anual laborista, que se inicia hoy, un indiscutido Blair se enfrenta a los sectores críticos de izquierda, cada vez más incapaces de minar su autoridad y la pujanza de su nuevo laborismo.

Ni siquiera un ligero descenso en la intención general de voto -los laboristas se sitúan en cabeza en estos momentos a 26 puntos de los conservadores- es contemplado con inquietud por el joven lider, quien, además de desconfiar de las encuestas en general, considera beneficioso ese pequeño retroceso. Sobre todo cuando va acompañado por un indicativo tan optimista como el respaldo popular a su política centrista. Según un sondeo publicado el sábado por el diario The Guardian, un 57% de los votantes laboristas -frente a un 7% que se muestra contrario- apoya con entusiasmo el desplazamiento del partido hacia posiciones más moderadas y la creciente limitación del papel de los sindicatos.