EL NUEVO AMOR DE RICHARD GERE

Richard Gere estuvo unos días disfrutando del verano nórdico con su nueva Pretty Woman, Stina, una joven estudiante sueca de 24 años, de la ciudad de Malmó, que durante el verano trabajó como camarera en un restaurante en la localidad de Bastad. Según una publicación norteamericana, desde que el actor se separó de la supermodelo Cindy Crawford y dio por terminado un breve romance posterior con otra modelo, Laura Bailey, había manifestado que confiaba en que el Dalai Lama le ayudaría a encontrar una nueva esposa. Según los rumores que acompañan siempre a la vida sentimental de los famosos, Stina encontró a Richard a través de su hermano, que es conocido del actor. Lo cierto es que la semana pasada ambos pasaron unos días juntos en una stuga [que es una cabaña sueca], en Kattvik, en la costa de Scania. Fue entonces cuando una cámara indiscreta captó a la parejá tomando un baño tal como Dios los puso en el mundo, imagen que rápidamente, altamente cotizada, recorrió el universo. Algo que no fue del agrado de la madre de Stina, que se quejó de "la desconsideración hacia la intimidad de algunas personas". La madre, que ha sido la única que ha formulado declaraciones sobre la nueva pareja, describió a Stina como una chica joven y de buen juicio, y dijo sentirse orgullosa de cómo era más que por el hecho de que su novio sea un famoso. Dijo que la relación era hasta ahora una cuestión de afinidad espiritual. Admitió que ella también había suspirado al ver algunas películas de Richard Gere, pero dijo que, "cuando uno ha pasado los 50, ya no está para aventuras". La noticia de la presencia del actor conmocionó a la pequeña población de Kattvik, especialmente la femenina, algunas de cuyas integrantes se las ingeniaron para espiar a la pareja y saber hasta qué tipo de pescado había almorzado. Una de las mironas, una adolescentes de 12 años, dijo que parecían muy enamorados, ya que él la acariciaba todo el tiempo.-