Puig difícilmente podrá volver a competir este año

El más optimista de los pronósticos augura que Alberto Puig no podrá volver a correr hasta dentro de unos tres meses. Teniendo en cuenta que la última carrera se disputa el 8 de octubre próximo en 51 circuito catalán de Montmeló, el piloto barcelonés, víctima el pasado sábado en Le Mans de un accidente mucho más grave de lo que se preveía, ha dicho prácticamente adiós a la temporada motociclista.Puig fue intervenido quirúrgicamente en la madrugada del pasado domingo en el Instituto Dexeus de Barcelona. por el doctor Josep Maria Vilarrubias. Tras la operación, que duró cerca de seis horas, el médico aseguro que no se podía prever la fecha de la reaparición del piloto a causa del estiramiento que sufre en el nervio ciático poplíteo externo. "Hasta dentro de unos 10 días no conoceremos el alcance de esta lesión", precisó Vilarrubias, "pero hay que tener en cuenta, que la convalecencia del piloto puede alargarse indeterminadamente" e incluso no descartó que Puig tuviera que ser sometido a una nueva intervención.

El problema del nervio

El doctor precisó que, en espera de la respuesta del nervio, las lesiones del Piloto en la pierna izquierda, de las que fue intervenido, "son más graves de lo que se esperaba". De acuerdo con el parte médico, Puig presenta fractura multifragmentada de la meseta tibial con arrancamiento completo del ligamento cruzado anterior, desinserción de. ambos meniscos, ligamento lateral externo, cápsula poste rolateral, arrancamiento de la cabeza del peroné con el tendón del bíceps y parcial del tendón rotuliano.En la intervención se le practicó la liberación por fascistomía de las masas musculares anteroexternas por la compresión que presentaban; exoneurolisis del ciático poplíteo en unos 15 centímetros; se le colocaron placas y tornillos para reducir las múltiples fracturas y se reinsertaron los fragmentos y las estructuras tendinosas afectadas. La gravedad de la lesión aconsejó que el piloto permaneciera 24 horas en la Unidad de Cuidados Intensivos, para controlar su evolución.

Puig sufrió una espectacular caída en la segunda sesión de entrenamientos del Gran Premio de Francia, cuando circulaba a una velocidad superior a 262 kilómetros a la hora, según manifestó el propio piloto a su llegada a la clínica Dexeus, a las diez de la noche del pasado sábado, pocos minutos antes de ser intervenido quirúrgicamente.

"Alberto tuvo la desgracia de caerse en la que es la peor curva de todo el Mundial", sentenció Michael Doohan. "Cuando vi dónde había caído, me sentí muy mal", agregó, "pero después me di cuenta de que, por fortuna, no le había pasado lo que temí".