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Conchita y Arantxa rehúyen el debate

Las dos jugadoras dirimirán hoy en Londres la supremacía en el tenis femenino español

Resulta difícil conseguir que Arantxa y Conchita hablen, la una de la otra. Las preguntas en las conferencias de prensa se suceden. Pero las respuestas son herméticas, poco sustanciosas, repetitivas y breves. Éste sigue siendo un tema tabú. Las dos mejores jugadoras de la historia del tenis español prefieren hablar en la pista. Será ahí donde hoy dirimirán cuál de las dos merece estar en la final de Wimbledon. Sus armas son muy distintas, pero las dos poseen potencial suficiente para aspirar al triunfo. En cualquier caso, una española estará en la final junto a Steffi Graf o Jana Novotna,A lo que no renuncia ninguna de ellas es a lanzarse mensajes subliminales a través de los medios de comunicación. "Todo el mundo sabe que la derecha de Conchita es lo mejor que tiene. Pero no saca tan fuerte como Schultz", comenta Arantxa. "Estoy jugando mi mejor Wimbledon, he roto una barrera al llegar a las semifinales y tengo mis opciones. Me divierto. Jugaré con calma, paciencia, confianza y agresividad. Ella es la campeona y tiene más responsablidad. Eso es una ventaja para mí".

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El mensaje de Conchita tampoco tiene desperdicio. "Soy la campeona e intentaré ganar de nuevo. Por ello no sentiré más responsabilidad que Arantxa",, afirma. "Para superarla hay que hacerlo todo perfecto. Será un partido duro. Pero sé lo que debo hacer. La clave estará en mi agresividad".

En un aspecto coinciden siempre: en que no las influye jugar la una contra la otra. Y es ahí don de aparecen todos los fantasmas. "Arantxa lamentaría más ceder el liderato español que el mundial", asegura el técnico holandés Eric van Harpen, ex entrena dor de las dos jugadoras. Y en cada enfrentamiento entre ambas lo que se dirime es una parte de este debate. Por el momento, la ventaja es clara para Arantxa. Sus tres títulos del Grand Slam y las ocho finales que lleva disputadas la avalan. Conchita ha sentado sus reales en Wimbledon. Ahí sigue siendo la primera y, hasta ahora, la única. Ésa es precisamente su ventaja hoy: juegan en hierba.

"La hierba favorece a Conchita", explica Carlos Kirmayr, actual técnico de la aragonesa y ex entrenador de Arantxa. "Conchita saca mejor y tiene unas armas que hacen daño. Arantxa puede ganar, pero su revés -su mejor golpe- no es el mejor en estas pistas. Sin embargo, hará lo que sea para imponerse". Kirmayr discrepa de las dos jugadoras en uno de los pocos aspectos en que ambas coinciden: "Será un partido tenso y especial. Juegan la una contra la otra desde los 10 años".

Cualquier pronóstico es arriesgado. Si Conchita está centrada y acertada en sus golpes, debe ganar. Pero es difícil que ocurra teniendo enfrente a Arantxa. Para los apostadores de Wimbledon, no obstante, la semifinal española preocupa poco. Para ellos sólo hay una favorita, que es Steffi Graf. Graf sigue sin perder un partido esta temporada. Lleva 30 victorias, a pesar de los problemas que le causa su espalda.

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