_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Los toros, la tortilla y la Unión Europea

Con mucho interés me enteré de los varios artículos y análisis en su edición dominical del 11 de junio sobre la adhesión española a la entonces Comunidad Europea en 1985. Yo he tenido la oportunidad de vivir durante casi cinco años en aquella época en España y a lo largo de todo ese tiempo he aprendido mucho del país.En la citada edición, comenta el autor Manuel Vicent, entre muchas otras cosas, que "España nunca será Europa hasta que no se acabe con las corridas de toros y se prohíba dormir la siesta con la tripa llena de casera y de tortilla de patatas".

Curiosamente, hace unos días apareció un anuncio en un periódico holandés bajo el título ¿Cuánto tiempo más le dejamos sufrir?, con el dibujo de un toro ensangrentado, ya en su agonía. El Comité Anticorridas de Toros convoca a nuevos socios para pagar una cuota anual mínima de 25 florines (2.000 pesetas) con el motivo, desde luego, de acabar con las corridas. Aunque este anuncio parezca dar, en cierto modo, la razón a Manuel Vicent, su observación es incompleta e ignora una cosa fundamental que nos toca a todos, ciudadanos de la UE: la identidad nacional.

Quiero dejar claro aquí que no soy defensor de un nacionalismo exagerado, ni tampoco me considero un gran aficionado de las corridas. Lo que sí me gustaría poner de manifiesto es que la integración europea sólo va a dar fruto cuando haya un respeto mutuo y total entre las naciones en cuanto a sus características específicas.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

España no es Europa, ni debería tener la ambición de serlo. Los españoles son europeos, como los holandeses lo somos también, así como todos los otros ciudadanos de la UE. Lo que es Velázquez para España, Rembrandt lo es para Holanda. Observaciones comparables se pueden dedicar a la tortilla o el Gouda, el girasol y el tulipán, hasta el sol y la lluvia. Respetemos lo típico de cada país para que se convierta el proceso de la integración europea en un paso realista y viable.-

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_