El adiós a Kevin Schwantz

El ex campeón del mundo de 500cc, el tejano Kevin Schwantz, utilizó el circuito de Mugello para despedirse del Mundial. Subió al podio por última vez, pero no vestido con mono de cuero, sino de paisano. Y lo hizo para entregar los trofeos a los primeros clasificados. Así fue como dijo adiós a la gente con la que ha compartido su vida durante los últimos 10 años.Schwantz, que también se despidió de la afición dando una vuelta al circuito en un coche, culminó un fin de semana emotivo, en el que se le acumularon los homenajes. En realidad, las muestras de afecto han sido continuas desde que la ser mana pasada anunció su retirada como piloto motociclista.

El viernes, en rueda de prensa, los organizadores del Mundial le dieron una sorpresa: su número de siempre, el 34, ha sido retirado y nunca más nadie podrá utilizarlo en la categoría reina. Esta operación, habitual en otras disciplinas, es totalmente nueva en este deporte. Schwantz no pudo evitar las lágrimas.

El campeón de 1993 dio su explicación sobre su retirada. "Me di cuenta de que no me lo pasaba bien subiendo a la moto", dijo, "y así no se puede seguir. Lo hablé con Wayne Rainey [triple campeón mundial, paralítico desde hace dos años por culpa de un accidente] y eso acabó de convencerme". En las próximas semanas continuarán los homenajes.

La retirada de Schwantz significa el adiós a uno de los más grandes pilotos de la última década. De él se recordará sobre todo su espectacularidad en la pista, que le dio 25 victorias y un título mundial. Y también que, por ahora, ha sido el último de los pilotos estadounidenses dominadores de la categoría reina durante muchos años.

A Schwantz le sustituye en el equipo oficial Suzuki desde el Gran Premio de Italia su compatriota Scott Russell, ex campeón mundial de superbikes. En la carrera de su debut se clasificó en 11ª posición.