La fiscal insiste en que se investigue cuántos escoltas tenía Aznar el día de su atentado

La fiscal de la Audiencia Nacional María Dolores Márquez de Prado presentó ayer un recurso ante el juez de Manuel García-Castellón contra la negativa de éste a practicar una serie de diligencias encaminadas a averiguar cuántos agentes escoltaban al presidente del PP, José María Aznar, y quién era el responsable de su servicio de protección cuando sufrió el atentado de ETA.La fiscal ha interpuesto un recurso contra la negativa de García-Castellón a solicitar al Ministerio de Justicia e Interior un informe detallado sobre el sistema de protección con que contaba Aznar el 19 de abril, incluyendo detalles sobre el servicio de contravigilancia. Sin embargo, el magistrado se limitó a requerir de Interior una información genérica sobre el dispositivo de escolta.

Márquez también ha recurrido la decisión de García-Castellón de decretar el secreto de las actuaciones, ya que la representante del ministerio público lo había solicitado para practicar dichas diligencias, a las que el magistrado no ha accedido, por lo que estima que ya no es necesario mantener ese secreto.

Además de instar al juez a que solicite de Interior el nombre del responsable del servicio de pro-tección del presidente del PP, la fiscal deseaba que se analizase el cable de casi 300 metros de longitud utilizado por el comando de ETA para activar el coche bomba que estuvo a punto de matar a Aznar, así como que se determinase el tipo de explosivo empleado. García-Castellón acordó el lunes que se procediera a practicar estas pruebas.

Aznar sufrió el atentado en la calle de José Silva, cuando se trasladaba en un coche blindado desde su domicilio hasta la sede del PP. Los etarras activaron manualmente el coche bomba, cargado con unos 40 kilos de explosivo, mediante un cable de casi 300 metros.