Guerra dice que "Ia derecha acecha detrás de las matas para recuperar el mando"

El vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, escogió ayer la localidad de Alanís, situada en la sierra norte de Sevilla, para dar un mitin de tono pedagógico y rural ante un público que no llenó los casi mil asientos preparados por los organizadores. Guerra subrayó que, en estas elecciones, el PSOE "no puede perder un voto" progresista porque "la derecha está acechando detrás de las matas para recuperar el mando". Aunque fue menos ácido con la formación que encabeza Julio Anguita, acusó a los dirigentes de Izquierda Unida en Andalucía de "actuar con trampa".

Guerra dijo no entender la reacción de los dirigentes del Partido Popular -"el de los Cascos", bromeó- por haber sacado a relucir el día anterior en Granada unas palabras recogidas por la prensa de hace unos años en las que el líder del PP, Jose María Aznar, defendía el mantenimiento de los símbolos franquistas.El vicesecretario general del PSOE aseguró que él no insultaba a la derecha, sino que "denunciaba" los comportamientos y las propuestas de los conservadores como las relativas a la reforma fiscal y laboral: "He visto fotografías en los periódicos de jóvenes del PP con barras de hierro en los mítines y dicen que yo les insulto", comentó.

Guerra acusó a la derecha de mentir sistemáticamente con ayuda de "algunos medios de comunicación".

En su opinión, los líderes del PP tienen una falsa pose "de humildad, que tal vez se lo han dictado los del Opus Dei", ya que así lo dictamina los estatutos de esta organización. "Aznar sale con esa capita del Opus Dei a decir que yo le insulto". Su misión, dijo, es contar cómo "falsifican la realidad". Y a él no le callaba ni "Aznar ni san Aznar ni los medios de comunicación que les apoyan".

Guerra dijo ser respetuoso con las tradiciones de los pueblos, y al hilo de la promesa del candidato de Alanís, Manuel Castillo, que ha incluido entre sus promesa electorales rehabilitar la iglesia parroquial, y de un artículo de Rodolfo Martín Villa -un perro viejo en el buen sentido de la palabra"- publicado ayer en EL PAÍS, contó que "hay monjas y hasta dos obispos" que rezan por él.

Segunda fila

El líder socialista acusó al PP de poner a "gente de segunda fila" al frente de las candidaturas de los pueblos, ya que no se atrevían a colocar a los primeros espadas porque "en las localidades pequeñas todo el mundo se conoce". En este sentido, afirmó que en localidades como Alanín, de unos 2.000 habitantes, "la derecha está acechando detrás de la mata" y aseguró que los "aguatenientes y terranientes" reciben más y mejores ayudas que las que van a parar a los jornaleros. "Hay un PER mucho más alto para los empresarios agrarios", aseguró Guerra.

El número dos del PSOE hizo un llamamiento a los votantes de IU para que "no se dejen engañar" ya que, en Andalucía, esta formación política está "en alianza con el PP". Guerra dijo no querer "investigar" este pacto, pero que una "parte de la izquierda en Andalucía actúa con trampa".

Guerra tuvo un recuerdo final para el empresario José María Aldaya, secuestrado por ETA. "Tal vez por el misterio de las ondas, nos pueda escuchar y saber que los que estamos en libertad no nos olvidamos de él", concluyó.