Sainz y Kankkunen se quedan solos

El piloto español Carlos Sainz (Subaru) y el finlandés Juha Kankkunen (Toyota) se disputarán hoy la victoria en el Rally de Portugal y el liderato en el campeonato del mundo. La tercera y última etapa sentenciará la ' carrera y deshará la igualdad entre estos dos pilotos, ahora a favor del finlandés por 22 segundos. Ayer, durante la segunda jornada, una salida de pista retrasó al tercer favorito, el francés Didier Auriol (Toyota), y convirtió en duelo bipartito la lucha a tres bandas del rally. Sólo Sainz y Kankkunen aspiran ya al triunfo.El retraso de Auriol, no obstante, no alteró nada de la tensión, de la emoción y de la incertidumbre en la batalla por la cabeza de la carrera. La caída del francés en la general supuso sólo una pérdida numérica: en lugar de tres, quedaban dos batiéndose sin contemplaciones por la victoria.

Y esos dos, Sainz y Kankkunen, siguieron luchando a muerte por cada segundo, buscando la ventaja en cada cuneta. El español, que había partido como líder por la mañana, tuvo dificultades para resistir el fuerte ritmo de su enemigo finlandés. Y éste acabó recuperando la primera posición casi al tiempo que su compañero en el equipo Toyota perdía toda opción de victoria. A Sainz sólo le duró tres tramos el liderato.

Por sus resultados, el nuevo Toyota Celica de Kankkunen, poco brillante en sus dos primeras actuaciones en Montecarlo y Suecia, pareció adaptarse mejor a la dureza de los tramos de tierra, muy rotos, con incontables roderas y algunas zonas de barro. Sólo en partes muy reviradas, con aceleraciones y recuperaciones continuas, se apreció una cierta ventaja del Subaru Impreza de Sainz.

Además, al renacimiento de su coche en Portugal se unió la nueva juventud de Kankkunen, un hombre que muchos ya habían pretendido enterrar por sus pobres resultados en los últimos tiempos y por su poca motivación desde que se proclamó campeón. del mundo por cuarta vez.

El finlandés hacía un año que no se mostraba tan competitivo, precisamente desde su victoria en el Rally de Portugal de 1994. Esta vez, sin embargo, le está poniendo las cosas difíciles a un Sainz que circula muy cerca del límite. Desde el inicio de la carrera nadie ha ganado más tramos que él. Se ha impuesto en 11 de los 21 disputados, por seis de Sainz.

"Esto está muy complicado", reconoció el bicampeón madrileño. "Se está corriendo mucho y nos es difícil poder mantenernos cerca de Kankkunen. Desde luego, las diferencias no son grandes, pero resulta preocupante la técnica que seguimos, pues nos cuesta mucho recuperarle terreno".

En cualquier caso, ;ayer tampoco hubo manera de que se abrieran esas diferencias. Dos segundos para Sainz, cuatro para Kankkunen, cinco por aquí, tres por allá. Aunque muy lentamente, el finlandés despegó ligeramente, pero su colchón de una decena de segundos fue casi siempre insignificante. Sólo al final de la etapa logró un margen relativamente amplio -10 segundos- que le permite encarar la jornada decisiva con 22 segundos de ventaja sobre Sainz, su mayor renta desde que se inició la carrera.

En cuanto al francés Auriol, por la tarde logró recuperarse del vuelco que sufrió en el tercer tramo, pero ya había perdido demasiado terreno -más de un minuto- La tercera posición quedó cómodamente en manos del compañero de Sainz, el escocés Colin McRae, que también estaba demasiado lejos de los líderes.

Por tanto, la etapa de hoy, con 141 kilómetros y 10 tramos cronometrados, coronará a Sainz o a Kankkunen. Y la lucha durará probablemente hasta el último momento, como casi siempre que se baten estos dos pilotos.