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BALONCESTO COPA DEL REY

El Madrid firmó un trabajo pulcro

El equipo de Obradovic ganó al León y jugará la semifinal con el Taugrés

Luis Gómez

Dando por sentado que el Madrid de este año es un equipo de dudosa solvencia e incierto caminar, justo es admitir que inauguró su estancia en la Copa con una actuación rigurosa. Hizo lo que tenía que hacer sin dar rienda suelta a algunos de sus pecados originales. El otrora indigesto León se convirtió en un cómodo entremés. La diferencia en el descanso fue elocuente (41-24) y sirvió una segunda parte de puro trámite. Los leoneses viajaron a Granada cortos de aspiraciones y sobrados de timidez.Hay partidos que se resuelven en el primer capítulo. No es un hecho frecuente, pero cuando se detecta uno de estos casos, el marcador no se equivoca. Los primeros movimientos de ambos equipos mostraban a un Madrid concentrado y un León en faena rutinaria. Ni un sólo detalle digno de mención se desprendía del juego del León, corto equipaje para eliminar a un grande, apenas una zonita mediada la primera parte por aquello del qué dirán. Su carrocería mostraba una rara mezcolanza entre jóvenes sin pulir de aspecto timorato y dos veteranos que alargan la hora de la jubilación. Las cicatrices y los kilos de sobrepeso denunciaban las verdaderas posibilidades de Thompson y Reggie Johnson en el cuerpo a cuerpo. Tanta despreocupación y tan compleja munición contrastaba con el esmero c* on el que los madridistas elaboraban sus primeras acciones.

Porque, sí, el Madrid hizo un esfuerzo por firmar un partido muy pulcro, todo sea que acaba de entrar en la fase decisiva de la temporada cuando las derrotas empiezan a no tener remedio. Estuvo disciplinado en defensa y comedido en sus acciones ofensivas. Lasa llevó las riendas con mucha seriedad y marcó un ritmo muy prudente. Hubo atención especial a evitar las pérdidas de balón y mucha severidad en el reparto de asistencias. Era un Madrid desconocido. Serio, callado y trabajador.Las estadísticas en el descanso rendían tributo a la obsesión del equipo madridista: un solo balón perdido, un verdadero hito. Pero decían más. Explicaban cómo la defensa madridista había reducido al León a porcentajes de acierto del 25% y cómo la pareja Sabonis-Arlauckas se había hecho con el monopolio del rebote.

Sobre bases tan sólidas, el Madrid encontró laooportunidad para comenzar a disfrutar de su Juego, y lucir algunos aspectos interesantes de su contraataque. Habían bastado 20 minutos para verle los resultados a un buen trabajo. La segunda parte quedó para el disfrute del personal.

A todo esto, a ciertos jugadores del León no les había cambiado la cara: Reggie Johnson enseñaba la misma tristeza que una llora antes mientras Thompson rn4raba a Sabonis con escepticismo. A sus años han visto demasiadas cosas como para no ser conscientes de lo que les esperaba. Cabía suponer que al menos hicieran uso de su oficio, pero los jóvenes que le rodeaban parecían entre tímidos y asustados. De ahí la falta de química de este equipo.

A falta de rival, Obradovic aprovechó la segunda parte para desentumecer los músculos de buena parte de su banquillo, con problemas de salud de un tiempo a esta parte. El partido lo había resuelto con seis de los siete jugadores sanos que le quedan en. la primera parte. Los minutos de la basura fueron para convalecientes como Biriukov y Antonio Martín, a los que acompañó Antúnez. Hecho el trabajo sucio, no les resultó complicado mantener el tipo y estirar el músculo para el partido de hoy frente al Taugrés, un equipo que está sobrado de gente en todos los puestos.Falta por ver si este ejercicio de rigor madridista no es más que un espejismo. Para derribar barreras de medio tamaño se ha demostrado harto suficiente, pero la irregularidad manifiesta de los; hombres de Obradovic obliga a poner en suspenso una conclusión de mayor fuste. No hubo insultos sino diálogo, la solidaridad sustituyó a las malas caras, el orden al caos y la prudencia a la histeria.

ElMadrid. hizo ayer un partido tan desconocido que mueve a la incredulidad. Demasiados cambios de comportamiento se están viendo en esta Copa. Todo sea porque con un título en juego y tantas dudas en el horizonte cada cual se aprieta los machos.

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