Lito asegura que el líder de UGT ha perdido la mayoría y ve inevitable un congreso extraordinario

Los dos sectores enfrentados de UGT se consideran vencedores del comité del día 25. El secretario general del sindicato, Cándido Méndez, está convencido de que contará con los dos tercios de votos necesarios para ratificar su decisión de destituir a los tres disidentes. Y el dirigente del grupo crítico, Manuel Fernández Lito, sostiene que la mayoría de Méndez se ha que brado, que éste perderá el comité y que será inevitable un congreso extraordinario. Lito sugirió ayer que, en ese hipótetico congreso, se enfrentará de nuevo a Méndez para acceder al liderazgo del sindicato.

Lito acusó a Méndez de "una irresponsabilidad tremenda" por haber conducido al sindicato a un comité extraordinario. La postura que !u federación, el Metal, mantendrá en la reunión del día 25 se decidirá la víspera, pero ayer adelantó que no van a respaldar la resolución de la dirección. Previsiblemente, los representantes metalúrgicos se abstendrán en la votación, en la que son necesarios 111 síes -dos tercios de los miembros del comité-.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, está seguro de que conseguirá los respaldos suficientes para ratificar Ia destitución de Dionisia Muñoz, José Luis Daza y Gustavo Gardey de la dirección del sindicato. Las manifestaciones de éstos responsabilizando al líder ugetista de Ja crisis y augurando su dimisión son, según Méndez, el mejor indicador de la "insostenible" situación que atravesaba el sindicato hasta la separación de los cargos de los tres disidentes.

El líder ugetista negó que las destituciones hubieran sido consecuencia de presión alguna, y justificó su larga gestación por su empeño en agotar antes todas las otras vías. Méndez está seguro de sus apoyos. "La inmensa mayoría de la organización", dijo, "comparte que había que resolver el pro blema interno de la comisión ejecutiva". Tras recomendar a los dirigentes sindicales "tacto y prudencia", Méndez abogó, por dedicar todas las energías al proceso de negociación co lectiva. En cambio, Lito está convencido de que la dirección del sindicato no va a reunir los dos tercios de los votos del comité. Él interpreta que los votos necesarios son 122, porque los miembros del comité son 181, pese a que no están elegidos 15 representantes de la federación de funcionarios que deben ser designados en congreso federal. No obstante, avanzó que no va a hacer cuestión de ello, porque ni siquiera habrá los dos tercios de los 166 delegados acreditados -111 síes-.

El líder del Metal fue aún más lejos al afirmar que "la mayoría del 36 Congreso, se ha roto" y que la división en la dirección del sindicato afecta también a los ocho actuales miembros. Según sus cuentas, .Cándido Méndez sólo tiene dos hombres que le apoyan Antonio Retamino y Antonio Ordóñez, aunque no los nombró expresamente- .

Manuel Bonmati, secretario de relaciones internacionales, y Pedro Díaz Chavero, secretario de acción institucional, aseguraron que esas acusaciones de Lito no son reales. Bonmati declaró a EL PAÍS: "Mi compromiso personal es de absoluta lealtad a Méndez". Asimismo mostró su preocupación por la crisis que han provocado los disidentes y el sector crítico en UGT. "En la situación de inestabilidad política que vive el, país", dijo, "el crear estos problemas es malo para los sindicatos y para el conjunto de la izquierda. Y más aún cuando se aproxima un Gobierno del Partido Popular". En relación al resultado del comité, cree que conseguirán los votos necesarios, pero añadió: "Si perdemos el comité, no nos asusta ir a un congreso extraordinario, porque en el debate se comprobará quién tiene un proyecto sindical".

Pedro Díaz Chavero asegura que Lito "está jugando a introducir factores de desestabilización que no existen. Él sabe que los ocho somos un equipo homogéneo en la defensa de las resoluciones del Congreso".

La federación del Transporte expresó también ayer su apoyo a Méndez. El líder de esta organización, José Javier Cubillo, declaró en Vitoria que los, tres disidentes deberían haber dimitido. "No tienen el derecho, de hacer -pasar a la organización por algo tan crítico e imprevisible como un comité extraordinario, en el que no tengo constancia de que existan los dos tercios de mayoría suficiente para resolver el conflicto, y, eso nos aboca, con toda seguridad, a un congreso extraordinario".