Los mineros rusos de Vorkutá y Rostov declaran una huelga que amenaza con desembocar en un asalto contra Yeltsin

Los mineros del carbón de Vorkutá, en el norte de Rusia, comenzaron ayer una huelga de aviso que amenaza con convertirse en un amplio movimiento con exigencias políticas -dimisión del Gobierno y elecciones presidenciales anticipadas- si no les son abonados los sueldos atrasados y no se aceptan otras demandas económicas que exigen. Hace ya una semana que están en huelga los mineros del carbón de la provincia de Rostov, en el sur de Rusia, por las mismas razones. La huelga de los mineros puede significar un nuevo golpe para el régimen del presidente Borís Yeltsin, que deberá afrontar elecciones parlamentarias este año y cuya popularidad es hoy sumamente baja.Los mineros no reciben sus sueldos desde noviembre pasado. El Gobierno no les ha dado el dinero estipulado en los acuerdos de tarifas de 1994. Sólo a los mineros de Vorkutá les debe más de 6.000 millones de pesetas. La deuda total a los mineros del carbón, según el Sindicato de los Trabajadores del Carbón de Rusia (STCR), supera los 40.000 millones de pesetas.

La situación sociopolítica en esta zona del norte de Rusia es hoy muy tensa y y aquí y allá se organizan huelgas locales y otros actos de protesta. Según los líderes obreros de Vorkutá, la ciudad está al borde de una explosión social masiva.

El Comité Obrero Urbano (COU) de Vorkutá apoyó las demandas económicas de los sindicatos mineros, pero también adelantó exigencias políticas: el cese del Gobierno y elecciones presidenciales anticipadas. Si Moscú no paga la deuda, el de marzo comenzará una huelga indefinida que puede poner en jaque al Gobierno. Los mineros, que en 1989. hicieron tambalear al Gobierno soviético y apoyaron a Yeltsin frente al entonces presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, hoy se sienten traicionados. "Los mineros de Vorkutá hicimos todo lo posible para que usted se convirtiera en. presidente de Rusia. Usted nos traicionó y nos engañó. Cada día nos hundimos más y más en la vorágine de la guerra, la pobreza, y la criminalidad", dice la declaración del COU.

El calendario de pago a los mineros, aprobado el sábado en una conferencia presidida por el vicejefe del Gobierno Anatoli Chubais, no logró convencer a los más de 100.000 obreros del carbón en huelga, que continúan sus acciones de protesta.