"Debemos buscar puntos en común, con Setién y con todos' frente a ETA"

José Eugenio Azpiroz, de 39 años, se ha visto obligado a volver a la presidencia del PP de Guipúzcoa, que ya ocupó en 1983 y de 1988 a 1990, como consecuencia del asesinato de Gregorio Ordóñez.

Pregunta. ¿Usted era el amigo mas íntimo de Gregorio Ordóñez en la política?

Respuesta. Me precio de haber tenido con Gregorio una buena amistad. Pero Gregorio tenía amigos en toda la ciudad.Yo no me puedo arrogar el decir que era su amigo más íntimo.

P. ¿Usted era, quizá, de los que discutía y reñía con él por su estilo, por su lenguaje desgarrado?

R. De alguna forma, sí. Teníamos dos caracteres muy diferentes. Quizá por eso nos queríamos tanto. Yo, aunque soy igual de sincero que era él, soy abogado y quizá por eso más prudente. Tengo otra forma de decir las cosas. La lealtad se basa en decir lo que uno piensa, en asumir una crítica sana y mutua.

P. Por el mero hecho de ser el sucesor de Ordóñez en la presidencia del PP de Guipúzcoa, ¿se siente amenazado por ETA?

R. ETA ha amenazado a los empresarios, a la Ertzaintza, a los políticos a los periodistas... ETA tiene bajo amenaza a toda la sociedad vasca.

P. ¿Va a pedir protección policial?

R. Es la policía la que debe saber si debe prestarme protección.

P. Usted ya ha tenido que llevar escolta en otras ocasiones. Incluso con la habilidad de no parecer que la llevaba, cuando era novio de su mujer, para que ella no se asustara. Ni se cohibiera, supongo.

R. Efectivamente, así es. Hay cosas que se deben hacer y no se deben decir.

P. ¿Qué le dijo su familia cuando le ofrecieron la presidencia del partido y la candidatura a la alcaldía de San Sebastián?

R . Me ha apoyado plenamente para hacerme cargo de la presidencia. Yo estaba moralmente obligado a aceptarla porque puedo hacer algo para ampliar el partido e incorporar a esa gente joven que cada día está más con nosotros, y que así pueda haber una regeneración progresiva del proyecto popular. Para la alcaldía, he dicho que hay personas, más aptas que yo. No es bueno además que, habiendo gente muy válida, la tapemos, y encima a costa de acumular uno cargos..

P. ¿No ha soñado nuncacon ser alcalde de San Sebastián?

R. No; sinceramente, no.

P. ¿Usted es un político con ambición?

R. Yo tengo una gran ambición: que llegue un día, cuanto antes, que convivamos en paz, que la diversidad y la pluralidad. se exprese de forma pacífica. Ésa es mi ambición. Ninguna más.

P. ¿El PP ha salido en San Sebastián definitivamente de las catacumbas?

R. Sí, sin duda ninguna. Ese, se ve en la calle, se ve en las urnas, en la mayor colaboración. con el partido.

P. En San Sebastián, ¿su adversario es el PSOE o el PNV?

R. El principal adversario es la violencia. Lo demás son competidores en una carrera legítima.

P. ¿Se ve a sí mismo tomando vinos o comiendo mano a mano con la portavoz de HB en el Ayuntamiento?

R.Con quien me gusta comer es con mis amigos y mi familia. Pero con las personas que den un paso valiente para desmarcarse de la violencia y condenarla no tengo ningún inconveniente en hablar.

P. ¿Cómo le suena lo que dice Arzalluz de que si algo se mueve en el entorno de ETA, en el Pacto de Ajuria Enea algo se debería mover?

R. En el pacto de Auria Enea hay que mantener el consenso y ciertos principios que han sido muy útiles para que toda la sociedad se sienta involucrada en la lucha contra la violencia. Pero no puedo negar que cualquier fórmula imaginativa dentro de la legalidad sería bienvenida si sirviera en el camino hacia la paz.

P. ¿Comparte las críticas al obispo Setién?

R. Desde el punto de vista humano, puedo comprender la sensibilidad de quienes le reclaman un mayor calor humano o un mayor apoyo. Ahora bien, en honor a la verdad, tengo que decir que fue contundente en la condena a ETA que hizo en el funeral de Gregorio.

P. Lo que reprochan sus propios compañeros del PP al obispo Setién es su trayectoria...

R. Como decía el propio Gregorio, a mí no me preocupa de dónde venimos, sino adónde vamos. Yo creo que tenemos que ser positivos, mirar al futuro y buscar los puntos en común no sólo con el obispo, sino con todos. No podemos estar permanentemente mirando al pasado, no podemos estar sacando punta de los. defectos que cada uno hemos tenido. Nuestro reto está en el futuro, no en el pasado. Por tanto, no quiero caer en la tentación de rebobinar y recordar lo que éste o aquél dijo. Luchar por el futuro exige unión, exige cortar con determinadas cosas que en el pasado han podido provocar disputas o malentendidos.

P. ¿Le dirá a sus amigos empresarios extorsionados por ETA que tengan el valor de no pagar y confíen plenamente en la Ertzaintza?

R. Yo confío plenamente en la Ertzaintza. Y los empresarios ya no pagan el impuesto revolucionario. Así que sólo hay que decirles que tienen el apoyo de todo el pueblo y el mío propio.