Los jueces ordenan al alcalde de Brunete que convoque una moción de censura

Aquilino González, del PP, alcalde de Brunete (2.900 habitantes), ha subido al pódium político: se ha convertido en el primer alcalde de la región al que el Tribunal Superior de Justicia obliga a convocaruna moción de censura en esta legislatura. El tribunal ordena en su sentencia "el inmediato resta blecimiento del derecho", según fuentes judiciales. En enero de 1994, Aquilino González se negó a convocar una moción de censura interpuesta por los grupos de la oposición (PSOE, IU e independientes) con la justificación de que "contenía defectos de forma". El alcalde argumentó, además que gobernaba correctamente y que no existían motivos para el debate político. Los jueces ahora le han quitado la razón y consideran que el regidor "vulneró el derecho fundamental de los concejales [de la oposición] a participar en los asuntos públicos".

En mayo de ese mismo año, la oposición volvió a presentar otra moción, que tampoco fue admitida a trámite porque el alcalde consideró que "en un mismo año no pueden presentarse dos mociones". Los jueces califican la postura ' del regidor de "obstruccionista" y aclaran que "al alcalde no le corresponde valorar si se dan o no las circunstancias motivadoras de la moción, extremos que deben ser debatidos en el correspondiente pleno".

González declaró ayer que no piensa convocar el pleno extraordinario al que le obliga la sentencia. "Recurriré al Supremo, tengo 10 días de plazo. Confío en la ley. La moción de censura debe esperar", explicó.Manuel Montero, concejal de IU, mostró ayer su alegría por el fallo judicial y avanzó que la oposición exigirá "la inmediata ejecución de la sentencia". Con respecto a la negativa del alcalde de convocar la moción, el edil replicó: "Ya no sabe lo que dice".

Los jueces del Tribunal Superior de Justicia, además de este caso, estudian los de Valdemorillo (3.700 habitantes), Humanes (8.800 habitantes) y Navas del Rey (1.250 habitantes), cuyos alcaldes también se niegan a debatir mociones de censura.