Kohl insta a Yeltsin a que ponga fin al baño de sangre en Chechenia
El catastrófico resultado del asalto ruso a Grozni, capital de Chechenia, y el baño de sangre que está suponiendo el intento de acabar por las armas con la secesión de esta república caucásica han hecho aumentar la presión occidental sobre Borís Yeltsin. Ayer mismo, el jefe del Gobierno alemán, Helmut Kohl, instó por teléfono al presidente ruso, de quien es amigo personal, a que busque una solución pacífica y urgente al conflicto.. Poco antes de reunirse en Chamonix con su homólogo frances, Édouard Balladur, Helmut Kohl mostró a Yeltsin su "profunda preocupación por el sufrimiento y número de víctimas civiles causados por los enfrentamientos" y por la "desproporción de los medios usados". La UE, por su parte, ha congelado la firma de un acuerdo comercial con Rusia.
No se cuestiona el derecho de Moscú a impedir que se separe parte de su territorio, pero sí el método, que ha costado centenares -tal vez miles- de vidas; muchas de ellas, de civiles víctimas de bombardeos indiscriminados.
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