SE INCORPORÓ

A las doce de la mañana de ayer, Pablo González Romero, el hijo mayor del presidente del Gobierno, bajó del turismo en el que viajó desde Madrid y se dirigió a la puerta central de accesos del Regimiento de Instrucción de Paracaidistas de Javalí, en Murcia. Exhibió su documentación, y el militar de guardia le requirió que abriera su bolsa deportiva, para comprobar su contenido. Superado el control de accesos, el recluta González se incorporó, al día siguiente del resto de los demás incorporados, a su nuevo destino en el periodo de servicio militar. La incorporación al regimiento de instrucción de Javalí Nuevo, a cuyas puertas esperó una verdadera nube de fotógrafos, del hijo del presidente del Gobierno estaba prevista para el martes, pero todos se tuvieron que retirar sin conseguir verle pasar por el puesto de guardia. Por fin, ayer sí lo hizo. Pablo González, antes de entrar en el cuartel, hizo una parada en el bar de la vecina localidad de Alcantarilla, en el que tomó una caña junto al conductor del coche y el guardaespaldas. Vestía ropa deportiva y lucía perilla y un corte de pelo que por su contundencia a buen seguro hace innecesaria la intervención del peluquero militar.-